Rafael Nadal ha logrado derrotar a Richard Gasquet por un contundente 6-4 y 6-0 en su primer partido individual oficial desde que hace ya quince semanas la muñeca le dijera basta y tuviera que retirarse del circuito por varios meses. Muchos esperaban que volviera pronto, pero el tenista de Manacor decidió dejar que su muñeca se recuperase completamente antes de volver.

Desde su eliminación en los octavos de final del torneo de Wimbledon ante el australiano Nick Kyrgios y antes de su debut en el cuadro individual en Pekín, el ex-número uno del mundo sólo comprobó el estado de su muñeca ante el francés Jo-Wilfried Tsonga en un partido de exhibición celebrado hace cinco días en Astaná y en el encuentro de dobles disputado en China junto a Pablo Andújar.

Tras esto, había llegado la hora de enfrentarse al circuito individual ATP y qué mejor lugar que el recinto que le vio lograr la medalla de oro en las Olimpiadas de Pekín hace ahora poco más de cinco años. Su rival era un Richard Gasquet que lleva un récord negativo de doce encuentros perdidos contra el tenista español. En este caso vimos al Rafael Nadal al que estamos acostumbrados. Sólido en el fondo de la pista, con gran movilidad y un golpeo que va minando a su oponente hasta colocarle contra la pared del fondo de la pista o no llegando a una pelota imposible.

Mantuvo su servicio con facilidad y aprovechó el único juego en el que Gasquet bajó la guardia para anotarse el primer set.

El segundo careció de historia y Richard Gasquet tuvo que ver como el balear le endosaba un 6-0 para acabar el partido por la vía rápida.

Hace ya muchos meses que no veíamos a Rafael Nadal jugar un partido individual. La lesión en su muñeca le había dejado en el dique seco tanto tiempo que algunos incluso habían olvidado de lo que este jugador es capaz en su plenitud física. Ahora solo nos queda disfrutar del segundo mejor jugador del mundo según la ATP. En su primer partido serio desde entonces ha dejado claro que la bestia a vuelto y tiene hambre.