Esta es una semana de vitalimportancia para Federico Delbonis de cara al futuro, ya que debe defender lospuntos obtenidos en este torneo la temporada pasada, en la que alcanzó la finalcon caída ante el letón Ernest Gulbis por 6-1 y 7-6(5). En caso de no poderigualar (al menos) o superar esa actuación, caería hasta cerca del puesto 90.  

Pese a la presión, el tenista deAzul, actual 74° del ranking mundial, volvió a ganar en sets corridos al igualque en su debut ante el ruso Teymuraz Gabashvili y se metió entre los ochomejores del ATP suizo. El argentino derrotó por 6-3 y 6-4 al ruso AndreyKuznetsov (124°) y volvió a acceder a una instancia de cuartos del final enesta temporada, como lo había conseguido en el ATP de Buenos Aires meses atrás.

Para conseguir el desequilibrio, Delbonis quebró el saque del ruso una sola vez en el primerset: en el sexto game, efectivizó lasegunda oportunidad que había creado hasta ese momento. Y pudo haber repetidola rotura en el octavo juego, en el que tuvo dos puntos para quedarse con elset. Pero no pudo y lo terminó cerrando con su servicio después de 31 minutos.



En tanto que la única vez que el sudamericano perdió su saque fue en elsexto juego de la segunda manga. Pero a esa altura no representaba ningunaamenaza, porque ya había quebrado en dos oportunidades el servicio del ruso, de24 años. El argentino se mostró sólido con la devolución y en el 5-4 tuvo dospuntos para partido con el saque de Kuznetzov, pero al igual que en el primerset, dilapidó ambas situaciones y liquidó el pleito con su saque. 

En la siguiente instancia el argentino enfrentará un duro escollo en subúsqueda por alcanzar nuevamente la final del certamen suizo.

Se trata delcrédito local Stan Wawrinka, máximo favorito a quedarse con el torneo y 9 delmundo, quien venció por 6-4, 3-6 y 6-3 al checo Lukas Rosol, 40 de la ATP y surgido de laclasificación. El único antecedente entre ambos tuvo lugar en Gstaad 2009 convictoria para el europeo por 6-4 y 7-5.