Siquisiera definir a un argentino seguramente diría: amante del mate y del asado,fanático del dulce de leche, cabulero y apasionado por los colores. Porque elamor por la ´´albiceleste´´ es algo que crece en cada partido, sin importar dondeestemos y hoy nos toca vivir una fiesta con la Copa América.

La CopaAmérica se juega en Chile y los argentinos dijeron ´´presente´´, entrevistamosa algunos de ellos en el partido ante Colombia para que nos cuenten sus cábalasy cómo viven el amor por la camiseta.

Gerardoes cordobés tiene 27 años y hace 13 años que vive en Chile; actualmente trabajacomo contador externo de una empresa de odontología.

Aunque hace mucho que viveen Santiago sus costumbres son bien argentinas: ´´Siempre veo los partidos de Argentinacon argentinos, de preferencia que sean mis amigos y si no me hago amigo deellos para el siguiente partido. La cábala es tratar de ver el partido con lamayor cantidad de amigos, siempre trato de que seamos varios y que todoslleguen´´, explica Gerardo.

Leandro tiene 29 años y al igual que Gerardo escordobés y hace 13 años que vive en el país transandino. Si bien no tienecábalas algunas cosas no pueden faltar: ´´El branca siempre tiene que estarpresente, hay que cantar y alentar hasta el final´´ y agrega: ´´Es lo más llorarcon tu himno y gritar un gol con el nudo en la garganta´´.

Marcelo es uno delos más grandes del grupo, con 48 años, ya cumplió las ´´bodas de plata´´ enChile, es técnico en turismo y trabaja en un mayorista del mismo rubro. Si bienno tiene cábalas siempre asiste a todos los partidos de la selección. Cree quelos muchachos nos deben algo, que deben soltarse y mostrar su poderío, enespecial Di María, Messi e Higuaín.

Encontra posición está Lúcas, uno de los más pequeños, tiene 21 años esestudiante y en los tiempos libres trabaja de extra o en promociones. Nació enMisiones, vivió 12 años en salta, 2 en Rosario y los últimos 6 en Santiago deChile. Para él la cábala más grande para apoyar a la selección es usar lacamiseta suplente en los partidos que son definitorios.

Si esto te parece mucho,es que aún no conociste al más cabulero del grupo. Te presento a Felipe: edad, 27años; ciudad de origen Capital Federal; profesión, psicólogo; tiempo que llevaen Chile, 1 año y medio; cábalas, siete. Si leíste bien, siete. La primera deellas, no adelantarse al resultado, es decir, no apostar un desenlace. Ensegundo lugar, nunca gritar ´´gol´´, si es que la pelota no está 100% adentro.La otra es: ´´el lugar de la victoria no se cambia´´, siempre hay que juntarseen el mismo lugar, si es que trae buena suerte. En quinto lugar, si perdimosdos veces seguidas en un lugar, entonces ahí sí se cambia. La quinta, a veces sirvedecir que va a ganar quien en realidad quiere que pierda.

Anteúltima, no sepuede decir: ´´Ojalá que gane argentina´´. Finalmente, si bien todo esto puedeno dar resultado, hay que hacerlo igual.

Puede parecerextraño, pero así somos, apasionados, sobre todo por los colores y la verdad,nos encanta ser así. Porque como dijo Jorge Luis Borges: "Olvidadizo deque ya lo era, quise también ser argentino".