Desde hace ya algunos años nuestra Liga Nacional de Basquetbol, aquella competencia que naciera en la segunda mitad de la década del 80, sufrió cambios bruscos en su forma de disputa a partir de la edición 2013/2014. Atrás quedó en el tiempo las tradicionales dobles jornadas de Viernes y Domingo, donde a lo sumo cada equipo jugaba como máximo 8 o 9 juegos al mes. Hoy en día nuestros equipos y por supuesto los jugadores deben afrontar semanas con 3 o 4 partidos en 7 días. O lo que es peor aún: disputar un solo juego en 6 o 7 días.

El nuevo formato al mejor estilo NBA de los Estados Unidos, con giras de 2 semanas y muchos encuentros trae a la larga el desgaste físico de los planteles.

Esto se debe que los mismos no son muy numerosos y su conformación en cuanto a las edades deja mucho que desear. Hoy cada equipo cuenta con 12 integrantes en la plantilla: 3 jugadores extranjeros, en algunos casos los clubes usan 2 o 1 y en otros no se usa esa ficha, 5 jugadores mayores y 5 menores, que son U 23 o sea menores de 23 años. Al promediar la competencia son muy pocos los clubes que no cuentan con lesionados en sus plantillas.

En la temporada 2013/2014, en lo que fue el "bautismo" del nuevo formato, era un común denominador las diferentes quejas de los jugadores por el desgaste que hacia esto en los planteles. A esta realidad hay que sumarle que en nuestro país, los equipos de Liga Nacional se trasladan vía terrestre para jugar la competencia: es decir que deben recorrer muchos kilómetros en colectivos, quienes en muchos casos no están debidamente equipados, para llegar a destino, jugar y salir al día siguiente.

Salvo en contadas excepciones como cuando un equipo del norte de país debe viajar a Comodoro Rivadavia, los dirigentes hacen un esfuerzo yfletan un charter para llegar a destino.

Pero el cambio en la forma de juego esta lejos dellegar, y nuestros queridos jugadores seguirán peregrinando por largas jornadas de viajes y juegos para que la rica y joven Liga Nacional de Básquetbol no muera nunca.