Como todos sabemos, desde la llegada del Ex Presidente Hugo Chávez Frías, los acuerdos económicos entre Venezuela y Cuba crecieron exhorbitantemente, y las relaciones pasaron a ser, de simple acuerdos diplomáticos, a una gran dependencia en varios aspectos, titulados en palabras bonitas como: cooperación, complementariedad, sustentabilidad y la gran unión económica.

Entre esas uniones comerciales se encuentra: el intercambio comercial que representaba más del 20% del comercio anual del país, mas de un tercio del combustible que consumía la Isla era procedente directamente de inversiones venezolanas, 115 mil barriles de petróleo sin costo amparado bajo acuerdos bilaterales, 40 mil fuentes de empleo a profesionales cubanos, entre otros.

Por más de 10 años Cuba mantuvo esta dependencia económica con Venezuela, pero desde la caída del precio del petróleo y junto a esto la muerte del Ex Presidente Chávez, Venezuela ha entrado en una abismo sin fondo, donde la mala administración del Gobierno de Nicolás Maduro y la ausencia de divisa petrolera han generado en Venezuela una crisis política, social y económica.

Cuba, al ver que Venezuela poco a poco se ha sumergido en una crisis, y al advertir esta caída, se preparó haciendo una reserva petrolera hasta el tope.

Por ejemplo, el 4 de marzo del 2014, Caracas envía a Cuba unos 155.000 barriles de petróleo diario, que son dos terceras partes de su consumo, así mismo y cuidando su economía viendo como no hundirse junto a Venezuela en una crisis, vio provechosa la oportunidad brindada por los Estado Unidos de iniciar de nuevo las relaciones con Cuba, esto no fue un cambio de la noche a la mañana, es más bien un resultado de 18 meses de secretas reuniones, antes de dar a conocer la noticia, dejando por fuera la gran importancia que tenia Venezuela para Cuba.

Las reuniones siguen y Cuba sigue teniendo resultados productivos; por ejemplo, el Departamento de Estado de los Estados Unidos, retira a Cuba de los países patrocinadores del terrorismo y se anuncia la apertura de sendas embajadas.

Todo esto genera un gran olvido de parte de Cuba hacia Venezuela, mientras Venezuela se hunde en una gran crisis, Cuba suelta su mano y toma la que ahora Estados unidos brinda.

Aunque mantiene públicamente su alianza ideológica con Venezuela e incluso le proporciona más de 5 mil funcionarios para servicios de contrainteligencia, el Gobierno de la Isla avanza a obtener mejores beneficios y condiciones para sus habitantes.