Una red de carteristas, cuyos miembros podían ganar hasta € 4,000 por semana  fue desmantelada por la policía francesa en un operativo llevado a cabo el martes 26 de mayo, en el que allanaron dos hoteles de las afueras de París.

Los ladrones, todos ellos de nacionalidad rumana, tenían entre 17 y 47 años y ya hacía dos años que perfeccionaban su técnica robándole a turistas en dos de las principales atracciones de París: la Torre Eiffel y el Palacio de Versalles.

Según los funcionarios de la policía francesa, los delincuentes tenían un estudiado sistema armado.

En general, trabajaban en grupos de tres personas, haciéndose pasar por turistas y comprando incluso la entrada a las atracciones, para no generar sospechas en los guardias.

En los pisos superiores de la Torre, donde los turistas suelen comenzar a descuidar sus pertenencias, un miembro de la banda distraería a la víctima haciéndole una pregunta o pidiéndole una selfie, momento que aprovecharía un segundo miembro para apropiarse silenciosamente del botín, que entregaría al tercer malhechor, que es el que tenía la responsabilidad de huir con lo saqueado. 

Los turistas más afectados eran los de procedencia asiática, especialmente chinos y japoneses que, al parecer, según el estudio «sociológico» realizado por la banda, son los que más dinero suelen llevar encima.

Los carteristas disfrutaban de un excelente y suntuoso estilo de vida producto de su subterfugio y no solían reparar en gastos. El año pasado gastaron más de € 130.000 en hoteles y se movían en taxi hasta sus "lugares de trabajo". Podían darse ese lujo, ya que en temporada alta la ganancia per cápita llegaba a ser de € 4.000  diarios (en efectivo y artículos). 

Tras nueve meses de ardua investigación, los ladrones fueron finalmente arrestados el pasado martes.

Si bien hay que celebrar que esta banda haya terminado tras las rejas, no es absurdo suponer que será rápidamente suplantada por otra. Por las dudas, va el consejo a los turistas parisinos: ¡que la belleza de la Torre Eiffel y los jardines de María Antonieta no los distraigan de sus preciadas pertenencias!