Según Business Insider, el Secretario General de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Jens Stoltenberg, declaró que la alianza "acompaña con fuerte solidaridad a nuestro aliado Turquía", esto a medida que los embajadores se reunían en una reunión extraordinaria para discutir la amenaza que enfrenta uno de sus miembros.

Turquía solicitó la reunión para debatir sobre la amenaza que supone el grupo extremista Estado Islámico para su integridad territorial y soberanía, incluyendo las acciones tomadas hasta ahora por las autoridades turcas como el bombardeo de zonas controladas por fuerzas rebeldes kurdas.

"Es justo a tiempo que nos reunimos hoy para enfrentar la inestabilidad que se asoma en el umbral de entrada a Turquía, y sobre la frontera de la OTAN," comentó el Secretario General justo antes de que los 28 embajadores se sumieran en una reunión a puerta cerrada.

El artículo 4 del tratado constitutivo de la OTAN permite a los Estados miembros convocar una reunión cuando consideren que su "integridad territorial, independencia política o seguridad" se encuentren en peligro. Esta es un tipo de reunión que la OTAN solo ha mantenido cinco veces en sus 66 años de historia.

La serie de acontecimientos fue desencadenada por la reacción del gobierno de Turquía ante un ataque suicida en la frontera con Siria que dejó 32 muertes y un ataque de ISIS que dejó un soldado turco fallecido.

Todo esto provocó que, después de meses de dudas, los aviones de guerra turcos empezaran a atacar objetivos en Siria y aprobaran que los Estados Unidos lanzaran ataques desde la Base Aérea Incirlik, que cuenta con una posición geográfica privilegiada en Medio Oriente.

Organizaciones como el Gatestone Institute han expresado su preocupación por los ataques de fuerzas turcas a los militantes kurdos que luchan contra el Estado islámico, por lo que aseguran que el gobierno de Erdogan está tomando como excusa a ISIS para atacar a este grupo de rebeldes que activamente defienden sus territorios en Iraq, Siria y Turquía.

De hecho, en un artículo para la revista TIME, Rebecca Collard explica por qué los kurdos son más una preocupación para el gobierno turco que el Estado Islámico.

También para Business Insider, Turquía teme que reviva la insurgencia kurda que persigue la creación de un Estado independiente. El Partido de los Trabajadores de Kurdistán ha luchado por autonomía para los kurdos en un conflicto que ha reclamado decenas de miles de vidas desde 1984, pues reclaman un territorio que agrupa territorios que forman parte de los actuales Turquía, Iraq, Siria, Irán y Armenia.

En Ankara, el Presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró que oficiales turcos y estadounidenses discutieron la creación de una zona de seguridad cerca de la frontera de Turquía con Siria que deberá ser liberada de la presencia de ISIS y asegurar que sea un área segura para el regreso de refugiados sirios. En rueda de prensa, antes de viajar a China, Erdogan también comentó que era imposible avanzar sobre un proceso de paz con los kurdos si los ataques sobre Turquía continuaban.