Segúnindicó un comunicado de los servicios secretos de Afganistán, NDS, HafezSayeed, supuesto líder del Estado Islámico en el denominado estado de Khurassan(que ocupa las regiones de Irán, Afganistán y Pakistán), murió en un bombardeoen el distrito de Achin, provinciade Nangarhar.

Junto aSayeed fueron abatidos otros 29 combatientes de ISIS.Los propios servicios de inteligencia afganos, según lo publicado por laagencia EFE, habrían sido los que dieron a las fuerzas armadas estadounidenseslos datos necesarios sobre la localización del “grupo terrorista”.

El ataque se provocó con un avión no tripulado.

Esta semana,en el mismo distrito donde se produjo este último bombardeo, ya se habíaprovocado un ataque a otro líder del Estado islámico. El lunes los combatientesestadounidenses mataron a Gul Zaman,quien se supone que era líder de la organización yihadista en Pakistán y Afganistán.

Porotra parte, en febrero ya había muerto otro miembro de la cúpula del EstadoIslámico. En esa oportunidad, en la provincia de Helmand de Afganistán murió AbdulRauf Khadim. Se cree que él controlaba el EI en el sur de Asia.

Lasemana pasada, el gobierno afgano implementó una nueva estrategia en unaoperación contra el Estado Islámico. También continuó un operativo contra lostalibanes.

En estas últimas semanas, en la provincia de Nangarhar se produjeronvarios combates armados entre los grupos antes mencionados por el control delterritorio en esa provincia.

Elpasado martes se realizó un primer encuentro oficial entre representantes delos talibanes y el gobierno deAfganistán. Esto podría representar un primer paso para dar lugar a lasnegociaciones de paz.

Este país está afectado por una guerra civil desde hace 13 años. Por el momento no se negoció unalto el fuego entre ambas partes.

En losmedios afganos se destacó que algunos importantes líderes talibanes se habíannegado a participar de la reunión del 7 de julio, posiblemente por diferenciasentre facciones. Entre los puntos importantes a tratar se encontraban lapresencia de tropas extranjeras en el país, las sanciones de la ONU y la toma de prisioneros. El grupo de mandatarios de Afganistán aseveróque no se va a negociar sobre el carácterrepublicano de la forma de gobierno del país ni los “derechosfundamentales” para los ciudadanos.