El pequeño Declan, nativo de Canadá, estacionó su moto al igual que lo hacen los adultos, él con tan solo tres años paseaba con su padre y los amigos por el puerto, pero el ser niño no fue de impedimento al momento de recibir una multa. En el minuto en que el pequeño supo andar, le regalaron su primera moto, con la que sentía muy alegre.

Como se pudo ver en la foto que se compartió por todas las redes sociales, estos motivaron a una infracción de tránsito, el policía expreso que siempre estacionaban donde querían y eso no debería ser posible; en el instante en que el policía le dio su infracción al padre, éste le pidió si no le hacía una multa a su hijo, y así no más le dijo que sí.

En la foto se veía al niño con una expresión de sorpresa, y su padre compartió que muestra lo que muchos sienten al momento de recibir una infracción por velocidad, Declan recibió su primera vez una infracción por motivos de aparcar mal su minimoto; en ese momento fue tomada la foto, esa situación mostraba al policía que sorprendía al niño aparcando de manera "ilegal", esa era un área prohibida.

La foto también fue publicada una cuenta social de la policía canadiense, y sorprendió a varios, lo que llevó a explicaciones, se explico que se mostro con el fin de exponer diversos aspectos de las autoridades de seguridad, ya que no es cosa de todos los días arrestar o encarcelar a las personas, del mismo modo les gusta divertirse.

La mamá del pequeño dijo que fue divertido y que al niño le gustó tanto que quiso dormir con la multa.

Según la CTV News no es anómalo el fingimiento de un arresto, de manera divertida y como forma de demostrar algo que no se debe hacer. El fin desde la policía fue de darle un susto y educarlo desde su pequeñez en temas de seguridad vial, el niño abría dejado su moto junto al puerto, y se le advirtió que allí no era lugar para estacionar, y con su libreta de infracciones le puso una multa.

En la página de La Prensa Libre, escribieron bajo la fotografía que hay que recordar que se prohíbe estacionar motos en la terminal de Ferry, y acompañando esta frase se expresaba a manera de broma explicativa que el motociclista que se veía era cruel y había sido encontrado haciéndolo. Esto fue compartido miles de veces, pero aún así no tuvo las expectativas esperadas ya que el niño ahora ama esa multa y no quiere dejarla.