El tifón Koppu llegó este domingo a la costa oriental de Luzon, que constituye la isla principal de las Filipinas, provocando la muerte de al menos 22 personas y destruyendo aldeas y campos de arroz, tras las inundaciones en el norte del archipiélago.

Desde la Agencia Meteorológica de Filipinas, anunciaron hoy que el fenómeno se ha debilitado y rebajaron la “categoría de Koppu de tifón a tormenta tropical”, ya que la potencia de los vientos pasó de 120 kilómetros por hora del día de ayer, a 85 km/h de este martes.

Sin embargo, las consecuencias del tifón fueron catastróficas, la información oficial de las autoridades locales y de los organismos de rescate, indica que son alrededor de 17 los muertos por ahogamiento o aplastados por árboles.

Además, el gobierno espera recibir más datos sobre algunas regiones que quedaron aisladas por falta de energía eléctrica, producto de los movimientos de la tierra y las inundaciones.

En tanto, los equipos de rescate estatales, las unidades del ejército y los grupos de voluntarios, han asistido con barcas neumáticas a los ciudadanos que se encontraban en las decenas de regiones afectadas por la inundación. Según el director adjunto de seguridad civil de la región, Nigel Lontoc, “el nivel del agua está aumentando deprisa y hay gente en los tejados”, indicó en declaraciones a la agencia de noticias AFP.

En la misma línea, la portavoz del Consejo de Desastres, Romina Marasigan, citada por Globovisión, expresó a través de una conferencia de prensa que, alrededor de “132.000 personas están fuera de los centros de evacuación” debido a que prefieren acudir a viviendas de familiares que pueden brindarles refugio.

Efectos devastadores

Desde la agencia de Gobierno de Filipinas, informaron que el fenómeno Koppu ha causado 497 inundaciones y el balance podría aumentar, a causa de las intensas precipitaciones que la tormenta continúa descargando sobre la región.

Entre las localidades más golpeadas por la catástrofe, se encuentra la ciudad de Baguio, situada en el noroeste de Filipinas; donde, durante el último día, han caído cerca de “775 litros de agua” por metro cuadrado, en tan sólo 24 horas.

Las lluvias intensas han causado también desplazamientos de la tierra y riadas que hicieron colapsar 24 puentes en el norte del país y numerosas carreteras quedaron anegadas. Asimismo, el gobierno declaró estado de alerta en varias localidades, para prevenir ante un eventual desbordamiento de los ríos, que aumentan su caudal rápidamente por el agua que reciben desde los cordones montañosos.

Por otra parte, según el Consejo de Desastres, el tifón ha provocado daños severos en los cultivos, en especial, en zonas de arrozales al norte de Manila. Las consecuencias materiales en la agricultura, se calculan, según la entidad, en unos 182 millones de pesos (3,4 millones de euros o 3,9 millones de dólares).

Cabe destacar, que Flipinas sufre anualmente entre 15 y 20 tifones durante las temporadas de lluvia, que se inician en el mes de julio y finalizan en noviembre.