Si bien anualmente se superan los récords en materia de seguridad aérea, lo que deja en evidencia que el transporte aéreo es el más seguro en el mundo, la reciente tragedia del avión Airbus A321 de la aerolínea rusa Metrojet, revela un dato sorprendente: es el séptimo Accidente de gran impacto en los últimos dos años, convirtiendo al 2015 como otro año oscuro para la aviación internacional.

El vuelo de la aerolínea Kogalymavia (Metrojet) desapareció de los radares luego de 23 minutos de vuelo, con 224 personas a bordo. El suceso ocurrió cuando el aparato sobrevolaba el Monte Sinaí en Egipto.

No hubo sobrevivientes.

Según datos del sitio web Aviation Safety, este accidente es el tercero de gran impacto y el más mortal del 2015, un año que también se ha visto sacudido por los siniestro del Airbus A321 de la alemana Germanwings, suceso ocurrido el pasado 24 de marzo en Los Alpes suizos y que dejó 150 muertos.

También, el pasado 30 de junio, un Lockheed Hercúles C-130 de la Fuerza Aérea de Indonesia se accidentó a los pocos minutos de haber despegado de la base militar de Medan-Soewondo. Todos sus ocupantes, un tal de 122, murieron en el siniestro, además de otras 17 personas que estaban en el momento del accidente.

Mientras que del año 2014 son recordados los dos accidente que sufrieron aeronaves de Malaysia Airlines, el primero el enigmático vuelo MH370 que desapareció de los radares con sus 239 tripulantes a bordo en algún lugar del océano índico mientras se dirigía a Beijing, China, luego de salir de Kuala Lumpur, en Malasia.

Los primero restos del Boeing 777-2H6ER se encontraron un año después (el pasado 29 de julio) en la Isla Reunión del océano índico.

Otra fatalidad que sacudió a la aerolínea malaya sucedió el 17 de julio del 2014, cuando otro Boeing 777-2H6ER matrícula 9M-MRD y que volaba de Amsterdam (Holanda) a Kuala Lumpur (Malasia) con 298 ocupantes cubriendo el vuelo MH17, fue derribado por un misil lanzado desde tierra mientras sobrevolaba el cielo de Ucrania cerca de la frontera con Rusia, una zona azotada por un fuerte conflicto bélico.

Días después, el 24 de julio, un McDonnell Douglas DC-9-83 (MD-83) se accidentó al noroeste de Gossi, en Malí. El avión perteneciente a Swiftair, pero operado por Air Argelia se estrelló con 116 personas a bordo. El vuelo AH5017 se dirigía de Uagadugú, en Burkina Faso hasta Argel, Argelia.

Finalmente, el 28 de diciembre del 2014, a escasos día de finalizar el año, un Airbus A320 de Air Asia cayó en el mar de Java, tras haber despegado del Aeropuerto Internacional de Juanda con destino al Aeropuerto Internacional Changi, en Singapur.

El vuelo QZ8501, desapareció con 162 ocupantes, 7 tripulantes y 155 pasajeros.

En total, en los últimos dos años estos siete accidentes aéreos han dejado 1.304 personas fallecidas, una cifra alarmante para el que es considerado como el sistema de transporte más seguro del mundo.