El día que Francia celebra su Día Nacional, fue atacada por el terrorismo nuevamente. Una multitud estaba celebrando el 14 de julio y esperaba el show de fuegos artificiales, cuando un camión, a toda velocidad, mató a 84 personas y dejó más de 200 heridos. La ubicación exacta de la tragedia es la ciudad de Niza, en el Paseo de los Ingleses. El asesino era tunecino, 31 años, divorciado, tenía problemas financieros, no era un fanático religioso, tenía permiso de residencia francés y trabajaba de repartidor.

La fecha elegida para el ataque no es casual, escoger el día nacional del país agredido es un claro mensaje que dice 'seguimos odiando a occidente y sus intereses'.

Es el tercer atentado que sufre el país galo en el último año. Una de las razones es porque Francia habita la mayor cantidad de musulmanes en Europa, alrededor de cinco millones de personas con esa religión. Lo que más duele a esa nación es que sus sistemas de inteligencia siguen fallando y sus alertas anti-terroristas no sirvieron de nada.

Lo más inquietante que muchos terroristasmusulmanesson franceses, de padres franceses, pero no sienten arraigo por ese país y prefieren unirse a grupos extremistas quienes le dan un sentido de pertenencia e identidad. Lo paradójico es que todos ellos fueron a escuelas y universidades, se atendieron en hospitales que brinda ese país. Se puede decir que los terroristas tienen una educación totalmente francesa pero adhieren a los grupos que aborrecen a occidente.

Los terroristas suelen tener buena instrucción académica, lo que los vuelve más temibles. Ellos dicen que atacan porque se sienten discriminados en los países occidentales desarrollados, pero siguen gozando del bienestar económico de esas naciones y no quieren regresar a su país de origen. El objetivo de ellos es agredir los puntos más valiosos para occidente: París, Madrid, Nueva York y Londres, hasta ahora, porque dicen que la próxima será Roma.Entre las víctimas fatales se encuentran niños, bebés y turista extranjeros.