Una de las enfermeras que trabaja en el Hospital Carlos III de Madrid dio su testimonio a Mediaset España sobre lo que debe vivir cada día al acudir al hospital a realizar su trabajo y luego volver a su casa con sus hijos. La mujer se siente insegura, ya que no sabe si los trajes son totalmente efectivos y le brindan el aislamiento necesario para no estar demasiado expuesta a la enfermedad que atemoriza al mundo en estos días.

"Tengo miedo" aseguró la enfermera que debe vivir en un riesgo constante ya que según ella las medidas del hospital no son suficientes.

Mientras que en África en el momento que las personas deben quitarse los trajes realizan un lavado de los mismos con un líquido altamente clorado, en el Hospital Carlos III los trajes no son descontaminados antes de que las enfermeras y médicos se los quiten. La enfermera además declaró que el espacio que tienen para ponerse los trajes y luego quitárselo es demasiado pequeño.

La mujer expresó no haber recibido ningún curso donde le enseñaran a colocarse el traje de manera correcta sino que un compañero de trabajo fue el que debió indicarle cómo hacerlo y que a pesar de que los pocos enfermeros que se arriesgan a atender a los pacientes en estas condiciones, ni consejeros ni la ministra se han preocupado por ellos, son ellos mismos los que cuidan uno del otro.

La enfermera que atiende a Teresa Romero (también enfermera), paciente que contrajo el virus ébola hace tan sólo unos días en su diálogo con Mediaset España también contó que la insuficiencia de sanitarios y la gran cantidad de pacientes que llegan al hospital hace que ella como sus compañeros de trabajo deban estar expuestos en las habitaciones mayor cantidad de tiempo que si hubiera más personas dispuestas a ayudar en su labor, lo que aumenta el riesgo de contagio.

La parte más triste de esta historia es el miedo que posee la mujer cada día al terminar con su trabajo y regresar a su hogar, ha llegado al punto de no querer besar a sus niños por temor a lo que pueda suceder.