Asa Butterfield tenía 11 años cuando emocionó al mundo en el papel de Bruno, el pequeño de ocho años que se hace amigo de El niño con el pijama de rayas. Primero la novela y luego la película adquirieron una fama sensacional de la que Asa pudo agarrarse para seguir su camino hacia lo más alto. Y si en este logro cinematográfico compartió cartel con Vera Farmiga y David Thewlis, grandes actores que interpretaron a sus padres, en su siguiente trabajo para la gran pantalla se uniría a Benicio del Toro, Anthony Hopkins o Emily Blunt.

Se trataba de El hombre lobo, uno de los títulos que resultaron ser de los menos afortunados del año en que se estrenó, pero una vez más, Asa hacía méritos en una gran producción norteamericana, de las que pese a no acarrear prestigio sí cuentan con la complicidad de la taquilla.

A continuación le tocaría rodar junto a otra grande: Emma Thompson. Él fue uno de los niños incontrolables a los que Nanny McPhee debe hacer entrar en razón. El regreso de la nana mágica, segunda parte del film estrenado en 2005, reunía también a un buen puñado de actores en papeles secundarios que le daban a esa gozada familiar el toque único del que últimamente este tipo de películas carece. Pero lo cierto es que contar con Maggie Gyllenhaal, Maggie Smith, Rhys Ifans o Ralph Fiennes es motivo suficiente para justificar el visionado del título en el que estén, y Asa tuvo la suerte de poderse rodear de todos ellos.

Pero es que después llegaría La invención de Hugo Cabret, la aclamada visión de Martin Scorsese acerca de la vejez sin gloria de uno de los padres del Arte de las imágenes en movimiento, George Méliès.

En ella, Asa era el niño que daba nombre a la cinta, el huérfano que tiene la posibilidad de conocer al director de Viaje a la luna, un hombre ya arruinado y casi olvidado interpretado por el gran Ben Kingsley. La invención de Hugo Cabret ganó cinco Oscars, todos técnicos, pero como no podía ser de otra forma en la carrera del pequeño Asa, fue todo un acierto para él intervenir en ella.

Con Kinsgley volvió a coincidir en la película que lo consagró a escala mundial, el blockbuster que lo convirtió en un nombre a recordar, aunque no resultara del todo fácil. En El juego de Ender él es protagonista absoluto, el que dirige al equipo que está a su cargo y el que comparte escenas y momentos de gloria con Harrison Ford y el oscarizado intérprete de Ghandi.

Actualmente rueda con otro tan enorme como los anteriores, Tim Burton, en la adaptación para el Cine de El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares, novela de Ransom Riggs que veremos el año próximo en las carteleras. Será con los compañeros de este largometraje junto a los que cumpla su mayoría de edad, y sus fans celebrarán que lo haga rodeado de Eva Green o Samuel L. Jackson, al saber que también ellos serán protagonistas de la película.