Ariel Ardit, reconocido cantante de tangos de Argentina, será protagonista junto a la Orquesta Sinfónica de Medellín de un recital único y extraordinario en el Aeropuerto Olaya Herrera, en el que interpretará una selección de las canciones más populares del eterno Carlos Gardel. A horas de su show, transmitido el miércoles 24 a partir de las 00:30 por la Televisión Pública, Ariel Ardit contestó las preguntas de Blasting News sobre este emotivo concierto.

¿Cómo surgió la idea de este recital especial en homenaje al 80° aniversario del fallecimiento de Carlos Gardel?

Hace 20 años en 1995 vi un homenaje a Gardel desde Toulouse, con orquesta sinfónica, muy emotivo pero nadie cantaba, era sólo instrumental. Yo ese mismo año había comenzado a estudiar canto lírico. Al ver ese homenaje surgió muy fuerte en mí el deseo de algún día llegar a ser alguien reconocido como para poder encarar un homenaje a Gardel como cantor de tango y con orquesta sinfónica. Luego pasó el tiempo, seguí estudiando canto y la imagen de Gardel iba creciendo agigantadamente en mi admiración. Hace dos años tuve la oportunidad de llegar por primera vez a Medellín, al visitar el aeropuerto Olaya Herrera, con el entusiasmo de un niño que quiere descubrir algo. Llegué a la pista y sentí que el momento había llegado, tenía que ponerme a trabajar firmemente en el homenaje Sinfónico a Gardel.

Y aquí estoy.



¿Cómo y cuándo te convocan para formar parte del mismo?

Nunca hubo una propuesta de nadie hacia mí. Fui yo quien propuso este homenaje y tuve la dicha que el festival, la Alcaldía y la Orquesta Filarmónica unieran sus esfuerzos con Cancillería y la Ministra de Cultura de Argentina, Teresa Parodi, para que todo mi sueño se pueda concretar.

A todos ellos estaré eternamente agradecido.



¿Cómo te preparás para tu participación en este recital tan peculiar y en el lugar emblemático donde él perdió la vida?

La preparación emocional no es la misma que la artística. La primera es un torbellino que tengo que controlar, por todo lo que me sacude emocionalmente. La preparación artística es ardua, pero con el apoyo de muchas personas que harán de este homenaje algo muy especial.

Son fundamentales en este aspecto el marco musical que ha creado mi querido Director Andrés Linetzky, desde los arreglos, y la emocionada dirección de la Filarmónica, a cargo del maestro y amigo Gonzalo Ospina.



¿Qué sentís al ser el único cantor elegido para interpretar sus canciones?

No podría describirlo en la verdadera magnitud, no hay una palabra que pueda significar mi alegría y orgullo. No hay nada más alto que esto para mí. Nada.



¿Qué significa para vos la obra de Gardel?

Fui bautizado, tomé la comunión y la confirmación en la iglesia católica. Durante muchos años creí solo en Dios. Con el tiempo, mi Dios es Carlos Gardel. No hay obra de Gardel, Gardel es la obra.



¿Cómo te inspiró a lo largo de tu carrera?

Gardel es mi inspiración, mi anhelo, mi guía y más alto objetivo. Eso me mantendrá ocupado y esperanzado toda mi vida, je!