"-Señor, ¿cuántas veces deberé perdonar a mi hermano cuando pecare contra mí? ¿Hasta siete veces? -No te digo yo hasta siete veces, sino hasta setenta veces, o cuantas veces te ofendiera" De esta manera iniciaba, en el año 1960, "La Patota" dirigida por Daniel Tinayre. Desde allí, se refleja la historia de Paula Vidal Ugarte (Mirtha Legrand), una profesora de filosofía recién recibida que imparte clases en una escuela de la Ciudad de Buenos Aires.

Hija de un juez estricto y conservador (José Cibrian) que menosprecia sus decisiones, Paula lleva adelante sus sueños con la ayuda de su pareja, de quien esta profundamente enamorada.

Una noche, mientras espera un colectivo, un grupo de hombres la confunde con otra mujer y la viola en un edificio abandonado. Tras este acontecimiento, vuelve al dia siguiente a dar sus clases creyendo reconocer a sus agresores entre sus alumnos. No obstante, decide no denunciarlos.

'La Patota' del año 1960, hablaba del perdón y de un arquetipo de mujer en proceso de liberación, tanto de las ataduras familiares y morales. Ya en esta época, Santiago Mitre, un director experimentado, situa a la protagonista, esta vez llamada Paulina Vidal, en la selva misionera. Dentro de tal ambiente, tan hostil y marginal, Paulina (Dolores Fonzi) una mujer apasionada por el trabajo social enfrenta a su padre, un juez autoritario, decidiendo no dedicarse a la abogacía y dar clases en una escuela rural.

Atrapada por una relación de años, por la cual no siente amor, Paulina se libera, como lo hizo el personaje de Legrand en 1960, de las ataduras para realizarse ella misma. El punto de giro, es el mismo, una violación que no deja culpables. Paulina, sabe quienes son sus agresores, pero no los denuncia, queda embarazada y decide no abortar.

Sin embargo, esta vez, Santiago Mitre coloca mas hostilidades para los personajes, no solo con la ayuda de la selva misionera, sino también con el entorno escolar al que se expone a la protagonista. Alumnos que no la escuchan ni la respetan.

Dolores Fonzi encarna a una Paulina Vidal, idealista que mas que perdonar, desea explorar los orígenes de la violencia y la marginalidad del panorama que observa, por lo que no condena a sus agresores.

Es imposible no conmoverse con su interpretación, ni identificarse con el contexto. 'La Patota' se estrena en un momento clave, en el cual las mujeres se hacen oír ante la violencia del presente. Una película que invita a la reflexión y al debate.