Hoy me levanté y lo primero que observé en la televisión nuevamente fueron las novedades sobre el caso del Fiscal de la Nación Alberto Nisman encargado de las causas de la AMIA. Este caso tan aterrador y desconcertante para todo el pueblo argentino ya es parte de cada uno de nosotros, los ciudadanos.

Hoy fue la noticia más triste sobre este episodio de asesinato político que nuestra Argentina está viviendo. Hoy he visto en todos los canales; incluyendo los oficialistas que maquillan y revuelven las noticias a su conveniencia, como el pueblo ha acompañado a la familia del Fiscal de la Nación en su entierro y han pedido por la paz de todos sus seres queridos y por la resolución inminente de este caso tan escalofriante.

Yo como ciudadana Argentina solo deseo lo mismo que la mayoría de los 40.000.000 de argentinos que somos y eso es... Esclarecimiento de este caso, encarcelamiento de los culpables sin importar las investiduras que hoy tengan y que se están viendo ensuciadas por su accionar criminal y corrupto, pido justicia para la familia, para el equipo de trabajo que ha quedado a la deriva. Pido equidad y basta de miedos y amenazas del poder a los que se atreven a revelar las verdades más crudas que están hundiendo a este, mi país.

Es un día gris y triste como lo viene siendo desde hace ya más de dos semanas en Argentina. Es un día más que la mayoría de los argentinos estamos esperando respuestas, es un día más que estamos sin conocer nuestro horizonte.

Yo, al igual que todos, espero que todos pero absolutamente todos los que tengan información y los que estén distorsionando la misma con relatos hasta ahora infundados y ridículos; se presenten en la justicia y declaren todo lo que saben o creen saber e indiquen y/o demuestren las pruebas que tienen para informar lo que están informando.

Con esto me refiero no solo al equipo del fallecido Fiscal de la Nación, sus custodios, sus otros colaboradores, sino también a la señora Presidenta de la Nación Argentina, Cristina Fernández de Kirchner.