Después que los romanos destruyen Jerusalén y el templo en el año 70 d.C., se inicia la dispersión del pueblo de Israel, los judíos que habían huído a lugares más cercanos volvieron a organizarse y se rebelaron (132-135 d.C.).

La rebelión fue aplastada y generó la ira del Emperador Adriano quién cambió el nombre de Jerusalén por el de "Aelia Capitolia" y el de Israel por "Palaestina", éste último nombre era una forma de humillar a los judíos ya que era el de sus enemigos acérrimos, los Filisteos; la mayoría de ellos fueron expulsados y el resto se asimilaron.

Así fue como la "Provincia de Judea" pasó a llamarse "Palestina" sólo por decisión del Emperador. Ningún "pueblo palestino" resistió las sucesivas invasiones y ocupaciones de asirios, babilónicos, persas, griegos, seleúcidas y romanos ya que hasta aquí no existía.

De tierra que "fluye leche y miel" a lugar desértico

Pasados unos años cayó el Imperio Romano y la "Tierra Santa" fue ocupada, por distintos imperios estableciéndose militarmente pero sin habitarla. Esto incidió en que el lugar se transformara en un páramo prácticamente desierto, lugar de paso de beduinos que a nadie tentaba para vivir.

En 1517 la "Tierra Santa" fue ocupada por el Imperio Otomano y a fines del siglo XIX comenzó la inmigración de colonos judíos que llegaban a habitar y trabajar la tierra.

Los turcos fueron derrotado en la 1ra. Guerra Mundial y el Reino Unido recibió el mandato de administrarla. Sus contradictorias promesas a judíos, árabes y franceses generaron hostilidades entre ellos y el Reino Unido delegó el problema a la ONU en 1947.

La ONU propuso al año siguiente un plan de partición que fue rechazado por los árabes y aceptado sólo por un sector de judíos.

El 14 de mayo de ese año proclamaron el Estado de Israel y el día en que se retiraban las tropas británicas una coalición de 8 naciones árabes atacó al nuevo Estado intentando "borrarlo del mapa". Israel venció a sus agresores y aumento el control de tierras. Luego hubo dos guerras más en las que Israel volvió a ganar y anexar territorio que luego devolvió en parte.

Y así hasta nuestros días se han alternado guerras con negociaciones, sin que se vea una solución al problema.

En conclusión: Gran Bretaña y la ONU decidieron sobre tierras que no les pertenecían buscando una solución rápida sin considerar los más de 3500 años de historia que favorecían a Israel, único grupo étnico autóctono existente en "Tierra Santa".

Los árabes que ocupan el 99,9% de Medio Oriente pretenden formar un nuevo Estado por el sólo hecho de haber ingresado a vivir en años recientes en el lugar ya que no hay ningún registro histórico ni mapa que muestre alguna evidencia de un pueblo, estado, reino o ciudad llamado "Palestina"; no existe un idioma palestino, ni cultura, ni historia , ni moneda, y hasta la bandera es la de Jordania menos una estrella.

Los judíos son conscientes de ésto por lo que muchas veces han cedido terreno más por su deseo de vivir en paz que por creer en la justicia de los reclamos árabes, sin embargo la actitud cada vez más agresiva de parte de Hamás quién declara abiertamente sus intenciones de destruir Israel para crear un Estado islámico (ver Carta Fundacional), hace que los judíos difícilmente arriesguen la vida de su pueblo concediéndoles el fundar su Estado junto al de ellos.