Que Lionel Messi es el mejor del mundo con la pelota a suspies, no caben dudas. En donde juega, es el distinto, incluso en un partidomalo, con 2 minutos de juego, te puede liquidar.La velocidad, la precisión y la certeza al momento de definir lo hacendistinto. En España ganó todo con el Barcelona, en la Selección Argentina, solollegan destellos de Fútbol.

El reclamo del público Argentino al rendimiento de Lio estan cierto y tan duro que muchas veces roza con la falta de respeto. Preguntascomo ¿Por qué allá si y acá no?, ¿Por qué no canta el himno nacional?, ¿quierejugar para la selección de España?, ¿hay que armar una selección como elBarcelona para que Messi rinda igual?

Todas esas preguntas lo único que hacenes transformarse en duras críticas, que como si fuera una bola de nieve seacrecientan y agigantan con el paso del tiempo. Criticas que si noslogramos abstraer, y las miramos desde afuera, son críticas sin contenido, quecante o no el himno no lo va a ser mejor jugador con la Selección.

Messi no ganó nada con Argentina, eso real, pero ¿es el únicoresponsable?, o juegan 11 contra 11. En su paso por la selección y bajo elmandato de distintos técnicos, Messi jugó de enganche, de punta, de mediapunta, de delantero, colaborando en defensa, solo atacando y como dice un viejorefrán la fórmula mágica y salvadora de cada DT. “Fracasó con total éxito”.

Es claro que no se le puede pedir a un jugadorque rinda con compañeros que ve solo una vez cada tres meses, lo mismo que conXavi, Iniesta y compañía, con quienes se crió jugando.

No es cierto que “no gano nada”, eso no es parte de su vida(ligas españolas, champions, balones de oro, botines de oro, etc, etc…),incluso el subcampeonato del mundo es menospreciado por el hincha argentino.

Entonces, ¿el problema es de Messi o de la gente que esperaque un Dios salvador, no solo gane en la cancha, si no que soluciones susproblemas y frustraciones de la vida diaria?.

Si no valoramos a Lio por sucapacidad futbolística, en el contexto en el que se desenvuelve, estamosequivocados. Él, con la Selección Argentina se juega el prestigio logrado en Europacon el Barcelona. ¿Por qué haría semejante cosa si no le interesara jugar parasu país?.

La realidad indica que hay que ver quien dirige a Messi (que no debe serfácil de dirigir seguro), pero si tenés un técnico (ya van dos en realidad) quea Mascherano, uno de los mejores centrales de Europa, y lo pone a jugar de 5 enla selección, para que vea la espalda de todos los jugadores rivales, ¿elproblema es de Messi?

o es la falta de capacidad de un técnico que sepainterpretar de manera correcta cómo y dónde Lio puede rendir de una formasimilar al Barcelona.

Messi es lo más grande que dio el futbol argentino en los últimos30 años casi, y después de él van a pasar unos cuantos años, para encontrar aotro que rinda algo parecido. Mejor es disfrutar de lo que hace en la canchacada partido y nunca perder la perspectiva de que el futbol es un juego deequipo, son 11 contra 11, y uno puede ser figura y destacarse pero no puedejugar por los demás. Después de Maradona, nos pasamos buscando al sucesor deDiego, lo tenemos en frente a los ojos y no somos capaces de verlo.