Y se fue nomás la primera parte del torneo de 30 equipos. Un mamarracho absoluto desde donde se lo mire, una falta total de profesionalismo y competitividad, un golpe bajo a la grandeza de nuestro Fútbol y nuestro nivel.

Equipos que invirtieron mucho para estar en mitad de tabla, como es el caso de Independiente, o como es el caso de Boca para estar en las tapas de todas las revistas de chimentos y que con todos los problemas mediáticos incluidos logró pelear arriba. Un Racing que se va afianzando como un gran equipo, aunque ya conocemos a la academia...

y un Central que no termina de sumar como debería jugando un juego de primer nivel.

River es un caso aparte, es irregular en su juego, como si necesitara presión para reaccionar, pero ganando el partido que le queda pendiente con Tigre puede compartir la punta con San Lorenzo, si, con el ciclón de Boedo, ese equipo que todos creían dormido en los laureles de la Libertadores y de a poco fue retomando el juego que venía buscando Bauza y no podía encontrar.

El goleador de este torneo es Marcos Ruben de Rosario Central y con su tremenda capacidad de definición esta un punto por debajo de los despidos, si, el goleador metió 10 pepas en 15 fechas, mientras que se fueron despedidos 11 técnicos en la misma cantidad.

Hoy nadie quiere hacerse cargo de las papas calientes, como es el caso de Independiente que no conseguía reemplazante para Almirón y encontró en un Pelegrino no deseado por el paladar negro de la gente del rojo la única alternativa para ocupar el banco. Efectividad inmediata o le devolvemos de un voleo.

En pocas palabras se fue una primera mitad totalmente olvidable para el fútbol nacional, es que después de haber visto al Barsa el sábado (y no soy de mirar fútbol de afuera) siento que la abismal diferencia económica se está llevando lo mejor de nuestro espectáculo.

Los nuestros brillan afuera, y lo poco que hay acá se vende porque los clubes derrumbados por las deudas generadas por pésimas administraciones no pueden mantenerlos, entonces tenemos que conformarnos con ver jugar a tipos medio pelo, esos que en el pan - queso del profesionalismo los elegimos porque no nos queda otra.

Europa se lleva desde nuestros mejores players hasta pequeñas promesas, de esta manera los pagan centavos.

Es que no logramos ni siquiera ver crecer la planta, ya se quedan con la semilla.

Mientras tanto, en suelo argentino, prendemos la tele para ver por ejemplo Defensa y justicia - Aldosivi, Olimpo - Sarmiento, Crucero del norte - Atlético rafaela. Que me perdonen los que pretenden un fútbol igualitario, pero estos partidos son comparables a las películas tailandesas del BAFICI. ¿Quién va a verlas? ¿A quién le importan? A nadie absolutamente!!! Pero es la que nos toca, "hay que hacer un torneo federal donde todos tengamos posibilidades", aunque la realidad es que la posibilidad es de hacer el ridículo comparándonos con el fútbol de élite.

Y gracias a Jebús por haber metido en el medio el escándalo de la FIFA para que seamos felices pensando que no somos sólo nosotros, todo está podrido, así que como "mal de muchos consuelo de tontos" sigamos corriendo la coneja que mientras tanto se nos escapa la tortuga.