El presidente de los Estados Unidos, Obama, dijo en una conferencia de prensa que Sony cometió un grave error al decidir retirar de las carteleras la polémica película ' La Entrevista', después de haber recibido una serie de amenazas terroristas de un grupo de hackers que se hacen llamar los Guardianes de la Paz (GOP).

Uno de los reporteros presentes de la conferencia le preguntó al presidente Obama qué opinaba de la situación y si Sony estaba en lo correcto en quitar de la cartelera de todos los cines el estreno de la película en cuestión, a lo que Obama le respondió, respecto a las inquietudes a las que se enfrentan y habiendo dicho todo eso, "creo que se han equivocado me hubiera gustado que Sony Pictures me hubiera llamado antes para hablar primero de la situación, yo les hubiera aconsejado que no ingresaron en esa situación donde uno se siente intimidado por este tipo de ataques criminales".

También continuó diciendo que otras empresas no deberían ceder a la presión de las amenazas de los hackers como lo hizo Sony Pictures, ya que esta situación no evitará crear un precedente. Cuando Sony tomó la decisión de tirar la toalla y quitar la película de las carteleras los expertos explotaron. El temor es que esta acción le envía un mensaje a los hackers de que las empresas y los individuos pueden ser controlados por una simple amenaza del hacker.

Desde la Oficina Federal de Investigación (F.B.I) el viernes expresaron que tienen suficientes pruebas para vincular a los hackers de Sony Pictures con Corea del Norte, en resumen, el FBI afirma que los métodos y las herramientas utilizadas para realizar el ataque cibernético a la compañía Sony Pictures se ha relacionado con Corea del Norte antes.

Sin embargo esta declaración realizada por la Oficina Federal de Investigación no deja demasiado claro el porqué tienen que proteger a sus fuentes confidenciales.

El Partido Republicano envió otro correo electrónico en tono amenazante dirigido a todos los ejecutivos de Sony Pictures donde les advertía que no ocurrirían más ataques, siempre que Sony cumpliera con no estrenar la película 'La Entrevista' en cualquier formato.