En Ginebra el Gobierno trazó el proyecto de Pacto Social para bajar salarios. La intención es convocar a los sindicatos a mediados de enero para que las remuneraciones que puedan exigir por paritarias se adapten a la realidad coyuntural del país. Lo ideal para Hacienda es un ajuste, con aceptación pasiva gremial, tomando como base para su sueldo no la inflación actual sino la eventual futura y sin considerar las enormes subas de precios de los últimos meses de 2015.

El macrismo no admite un protagonismo importante del Estado, sino que cada gremio fije su salario condicionado a ganancias, estancamientos o mermas de ingresos de los empresarios.

Prat Gay acaba ser explícito con los sindicatos, que protejan la fuente laboral antes de pedir incrementos que podrían ocasionar despidos.

Mientras piensa que el pacto empresarial gremial permitirá arribar a un ajuste de sueldos para los trabajadores hasta que la inflación empiece a bajar, auguró que es muy difícil reducirla. Subrayó que 2016 arrancará con una inflación anual del 30 por ciento, mientras el Gobierno pretende cerrar este año con una suba generalizada de precios de entre el 20 y 25 por ciento.

"Cada paritaria discute lo que puede discutir”, afirmó Prat Gay.Cada sindicato sabrá hasta qué punto puede arriesgar salarios a cambio de empleos", declaró al canal América.

Si los sueldos llegaran a medirse de acuerdo a la inflación, cree que entre marzo 2016 y el mismo mes de 2017, será “ 20 % o por debajo de ese nivel".

Espera que luego baje a 15%, después a 10 para continuar con 5% anual. Pero aclaró que los aumentos no caben sin que antes crezca la economía.

El alto incremento de la canasta básica experimentado por las expectativas de devaluación golpeó fuertemente al bolsillo de los trabajadores, y si bien en el gobierno hablan de "recalcular" los precios, el empresariado que maneja el mercado ya anticipó que no volverán atrás con su remarcación.

Macri dejaría a 1500 personas sin empleo en Santa Cruz.

Detendría la construcción de las represas "Néstor Kirchner" y "Jorge Cepernic”, lo que además significaría un perjuicio para el Estado de 1500 millones de dólares.

Más pérdidas de trabajo y de divisas para el país; Macri va contra la demanda energética a favor de la importación. Por incumplimiento contractual, aludiendo a posibles daños al medioambiente que ya se han comprobado que son inexistentes, “eliminaría otros 3.500 empleos directos y 10.000 indirectos.

Quitará al país 1.740 MW necesarios para la creciente demanda energética; derrochará divisas por importación de combustibles y reservas.Pondrá en riesgo el financiamiento fijado por US$13.000 millones y Swap de monedas por US$11000 millones” informó en un comunicado UTE Represas Patagonia, integrada por China Gezhouba Group Corporation – Electroingeniería S.A. e Hidrocuyo S.A.

La ex presidenta CFK defendió a los trabajadores en un artículo escrito en el Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo y a los beneficios que traerían las obras, ante el desacato de Macri a la legislación provincial y resoluciones de la audiencia pública del 9 de diciembre.

Los textiles alertan sobre quiebre laboral y denuncian manejos para generar importación. Oponiéndose al ingreso de mercadería extranjera, la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria pidió a los empresarios que “no convaliden” aumentos de precios de materias primas e insumos.