En un principio, poco y nada se hablaba de Matías Schrank dentro y fuera de la casa de Gran Hermano 2015. El misionero, que había sido expulsado del juego tras un intento fallido de deshacerse de Brian Lanzelotta, cambió totalmente su status en el juego. Tan así que ya cuenta con su propio tema musical: “San Matías”.

La canción, escrita y cantada por un grupo de seguidores del participante misionero, es un rap que relata las experiencias que viene sosteniendo Matías dentro de la casa de GH 2015. “Los otros participantes en él no creían, se pensaban que era un potus, gran error, ahora no pueden sacarlo ni con mil complots”, dice parte de la letra del tema.

También se resalta que el misionero no cuenta con antecedentes dentro de la farándula nacional (Tal como es el caso de María Paz Delgado y Mariano Berón) ni cargo importante, pero si el cariño del público.

“Lo van a criticar, pero el entró a jugar”, dice más adelante la canción, haciendo referencia a las jugadas que hizo el participante desde que reingresó a Gran Hermano 2015. Una de esas jugadas fue perder una prueba semanal al propósito, con el fin de fastidiar a sus compañeros dentro de la casa.

“He vuelto más fuerte que nunca”, se lo escucha decir a Matías en el final de la canción. Comentario que había lanzado en su retorno al juego, tras haber sido prácticamente votado por todos los integrantes de la casa, quienes lo tachaban de “traidor” por haberse animado a fulminar a Lanzalotta.

De Norman Bates a Cristian U

Los primeros momentos de Matías en GH 2015 se lucieron por su extraña presencia. El misionero, que había ingresado al juego proclamando su virginidad al mundo, llamó la atención de sus compañeros por su comportamiento. Silencioso, casi imperceptible, llegando a ser considerado el “Norman Bates de GH” (Personajes del film norteamericano “Psicosis”).

Todo eso quedó en el pasado cuando fue expulsado de la casa.

Cuando el público la voto para volver al juego, fueron varios los que lo compararon con Cristian U, el ganador más recordado de las ediciones de Gran Hermano. Al igual que el ex campeón, Schrank no gozaba de la simpatía de los habitantes dentro de la casa y volvía para alborotar el juego.

Varios “hermanitos” que antes lo miraban con desprecio comenzaron a verlo como uno de los favoritos a llegar a la final. Maipi fue una de esas personas, y una de las primeras en acercarse al misionero para armar una estrategia de juego.

Hoy en día Matías Schrank ha conseguido eclipsar la figura de Brian, el participante oriundo de La Tablada que se postulaba como el único posible ganador del reality.