Luciana Salazar se encuentra viviendo en Washington, Estados Unidos. Se mudó a la capital norteamericana porque su novio, el economista Martín Redrado, está trabajando para el Banco Mundial en esa ciudad. La modelo dejó todo para acompañar a su pareja en esta nueva etapa laboral que él está viviendo. Salazar y Redrado se hospedan en el fastuoso hotel Mandarin Oriental, y piensan quedarse mucho tiempo en la metrópoli, porque este nuevo empleo le interesa a Redrado, por lo que arovechará al máximo esta oportunidad.
La rubia compartió fotos de su nueva vida en la capital estadounidense en sus redes sociales.
Alli mostró todas sus actividades: entrenamiento físico, ir de shopping, paseos por la ciudad y la búsqueda de una nueva casa. Salazar quiere habitar una gran vivienda para estar cómoda con su pareja, y tal vez buscar un embarazo. En junio de este año quieren estar instalados definitivamente en Washington, pero la mediática aclaró que vendrá seguido a Buenos Aires, para tranquilidad de sus fanáticos.
El economista también vendrá seguido a la Argentina, ya que tiene dos hijos: Tomás, de 20 años y Martina de 14, frutos de su primer matrimonio. Es sabido que Salazar tiene mala relación con los hijos de su novio, hasta llegaron a llamarla 'Lucifer'. Fue por ese mal vínculo que Salazar y Redrado estuvieron separados un año.
Allegados a la modelo cuentan que ella aceptó enseguida instalarse con él en Estados Unidos, para evitar verse con la familia de su novio y de esa manera, no tener peleas con él.
La mediática no encuentra la forma de llevarse bien con los hijos de su pareja, tiene mala relación con los dos. Los jóvenes no la quieren porque no les gusta que su padre esté de novio con una mujer tan expuesta.
Sienten verguenza de la situación y se lo han hecho saber a la modelo en reiteradas ocasiones. Los hijos de Redrado tampoco quieren que su padre tenga más hijos, porque creen que con ellos es suficiente. Algo que va en contra del deseo de Salazar, que sí quiere ser madre.
