Hace poco me di cuenta que lasredes sociales son utilizadas únicamente para mostrarle a la gente “lo felicesque somos”. ¿A que me refiero con esto? Lo digo porque últimamente estuvemirando las fotos de la gente que sigo y de la gente que no. Y encontré enellas lo que pareciera ser algo ficticio. Una realidad que no existe. En lasfotos publicadas se ve reflejada una constante mentira. Fotos armadas,editadas, transformadas. Todas tratando de impresionar a la gente que nos ve ynos sigue.

Según el estudio "Envy onFacebook: A Hidden Threat to User's Life Satisfaction" -es decir, "Laenvidia de Facebook: el engaño escondido en la satisfacción de la vida delusuario"-, una de cada tres personas se siente más insatisfecha consu vida tras visitar las Redes Sociales.

¿Y para qué es esto? No tengo unarespuesta a esta pregunta. Porque yo también lo hago. Yo no muestro imágenesmías en momentos de tristeza o soledad, ni subo videos míos quejándome de cosascotidianas que me suceden. Muestro únicamente una imagen, una realidad, que esla que le quiero dar a mi “publico”. Trato, al igual que muchos, de mostrar mifelicidad… mis momentos felices, en fotos.

Y los likes, ¿Qué sonlos likes? Un número, nada más. Las amistades no se miden por likes,la gente que te quiere tampoco. ¿Por qué nos enojamos tanto con ese amigo que“no nos likeo la foto”? ¿Por qué no aceptamos que quizás no legusto nuestra publicación? Pareciera a veces que es lo único que nos importa,que solo subimos una foto para ver cuanta gente nos la aprueba por medio de un“me gusta”.

¿Y está mal? No sé si está mal.Porque no se que está bien o que está mal. Si existiese una red social quefuese únicamente para mostrar cosas desagradables, tristes o depresivas, nocreo que esta llegaría muy lejos. Porque las personas estamos constantementequeriendo ser felices (o por lo menos demostrarlo). Tratamos de dar una imagende “felicidad plena”.

Y lo más raro, es que esta imagen se la damos a la genteque no nos conoce tanto, a la que solo nos sigue, a aquellos que solo vennuestras fotos. Porque la gente que nos conoce, sabe perfectamente que nuestro“perfil” no es nuestra realidad absoluta. Que parecería ser una “pantalla” lacual mostramos para transmitirle al mundo, a la gente, que estamos bien.