La red de mensajería instantánea más popular puede decidir si te echa de su plataforma. Esa letra chiquita que nadie leyó cuando comenzó a utilizar la app explica todo los detalles. En los últimos meses hubo muchos usuarios que se han quejado de que los han expulsado de la aplicación, que ya no contaban con su cuenta de Whatsapp y lo mejor de todo es que no sabían ¿por qué?

Una de las condiciones más importantes que expresa Whatsapp es que no se permite el uso de sistemas automáticos para el envío de mensajes masivos, como es el caso de los robots automatizados o cualquier tipo de software que envíe mensajes más rápidos que el tiempo que lo haría un usuario de carne y hueso.

Y por supuesto, tampoco admite el uso de su servicio con el fin de enviar mensajes comerciales, como serían los típicos ya, anuncios comerciales categorizados como spam. A grandes rasgos podríamos decir que son las mismas cláusulas que tienen en Facebook, pero quizás en Facebook ya las tenemos más claras o estamos más acostumbrados.

Whatsapp también impone pena por el contenido que se escribe, ya que no se permite información que contenga publicidad para promocionar un negocio. Además hay muchas empresas que lo utilizan para almacenar información personal.

En cualquiera de los casos que se incumpla las condiciones de uso de la red, Whatsapp se reserva el derecho a eliminar tanto al usuario, como sus contenidos sin previo aviso.

Pero lo cierto es que Whatsapp generalmente va notificando de las faltas para que los usuarios sean conscientes de sus errores y puedan evitar la eliminación de su cuenta.

Por otra parte y la menos esperada por los usuarios es la que si veinte usuarios bloquean una misma cuenta, en este caso Whatsapp investiga enseguida ¿por qué se han producido tantos bloqueos en una cuenta?

y si comprueba que esta cuenta está cometiendo faltas graves, entonces toman las medidas necesarias que son echar al usuario de Whatsapp.

Hasta ahora no había salido a la luz la cantidad de requisitos y/o quejas que tiene Whatsapp para mantener una cuenta, ya que nadie las había leído ni nadie se había quejado, porque de hecho existen desde que se creó la aplicación.