Ubicado a 273km de la capital de la Provincia de San Juan, en dirección noreste, el Parque Provincial Ischigualasto, más conocido como 'Valle de la Luna', se erige como uno de los lugares más preciados del mundo por sus tesoros paleontológicos y su flora y su fauna, conformando 63.000 hectáreas de área protegida.

'Ischigualasto' es un término de origen diaguita que significa: 'sitio donde se posa la luna'; de ahí el nombre con el que se lo conoce comúnmente, 'Valle de la Luna'.

Hace más de 200 millones de años en este lugar había un lago, rodeado de vegetación y con una importante cantidad de especies animales, terrestres y acuáticas.

Hoy, es un lugar desértico y árido, con fuertes vientos y altas temperaturas; sin embargo, se encuentran todos los vestigios de vida animal y vegetal de ese pasado.

El choque de las placas tectónicas, Nazca y Sud Americana, hace 70 millones de años, generó presión provocando que en la Cordillera de los Andes algunas rocas ascendieran y otras se hundieran. De esta forma, en Ischigualasto, las rocas de millones de años emergieron y luego, el desgaste que ocasionaron los vientos y el agua, dejaron al descubierto restos fosilizados de vertebrados y abundante flora. Dinosaurios, variedad de reptiles y árboles petrificados se encuentran de manera intacta, permitiendo reconstruir parte de la prehistoria del planeta.

A su vez, es posible observar toda la secuencia de rocas que documentan el período Triásico de la Era Mesozoica. De allí, la importancia que posee este sitio, para fines científicos.

La erosión, día a día fue tallando diversas figuras; esto llevó a que los lugareños las denominen de acuerdo a su similitud con formas conocidas tales como: 'Valle Pintado', 'La Esfinge', 'El Submarino', 'El Hongo', 'La cancha de bochas', y las 'Barrancas coloradas'.

Una de las más llamativas es 'La cancha de bochas'; en este espacio se observan esferas prolijamente pulidas, apoyadas sobre una superficie plana, siendo casi inexplicable su formación. Se cree que, distintas partículas de sedimento se agruparon por atracción molecular. También las imponentes 'Barracas coloradas', que se erigen hasta 200 metros de altura, con un color rojo intenso debido a la presencia de óxido de hierro, contrastando con los grises, ocres y verdes del paisaje.

En el Parque de Ischigualasto se ha hallado evidencia que demostraría la presencia del hombre desde épocas muy antiguas. Figuras talladas en las rocas poseen una antigüedad de alrededor de 1.500 años.

El cuidado de los yacimientos paleontológicos está a cargo de la Universidad Nacional de San Juan. La misma, desarrolla actividades relacionadas en el llamado Museo de Ciencias Naturales. Allí se encuentran diversos restos fósiles de dinosaurios hallados en el parque; entre ellos el 'Herrerasaurus Ischigualestensis', considerado el dinosaurio más primitivo conocido en el mundo, y el 'Eoraptor lunensis', de aproximadamente 235 millones de años.

Tanto el museo, como el parque en sí mismo, es posible recorrerlo con la compañía de un guía atravesando los senderos transitables. La mejor época para visitarlo es de abril a junio y de agosto a noviembre, evitando así, los meses de intenso calor y la temporada invernal de lluvias.