Si tenés la suerte de poder tomarte un finde para pasear por la maravillosa Buenos Aires, no podés dejar de pasar por Tecnópolis, una miniciudad en la que se ve reflejada todo tipo de muestras, para grandes y chicos.

Llama la atencion de todo el público el fantástico mundo de los dinosaurios, con sus réplicas perfectas y sonidos estratégicos que simulan la vida de estos animales en su hábitat natural, desde el más pequeño, hasta las peleas por la supervivencia del más fuerte. Asustará a más de uno el Tiranosaurio Rex, saliendo de una de las paredes del stand de peleontología.

La magnífica Plaza de las Banderas, en donde flamean en todo su esplendor 200 banderas argentinas, escenario obligado para la foto grupal de todos los colegios que concurren con visitas guiadas, y grupos de todo tipo, como jubilados, jardines de infantes, auxiliares de la Educación, étc.

Totalmente recomendable e imperdible es el acuario, con sus túneles de agua y pantallas gigantes de peceras naturales, sin olvidar a la ballena franca austral, que descansa en la entrada moviendo su cola y lanzando chorros de agua.

La empresa minera también tiene su representación con los infaltables simuladores, que te hacen viajar al centro de la tierra. Al igual que la extracción de petróleo y toda la industria YPF, que te lleva en un viaje subterráneo y al principio de los tiemposm para ubicarte adónde se formó el oro líquido.

Al que gusta de la arqueología y la antropología tiene su lugar representativo muy bien logrado. También hay una réplica de la 'Cueva de las Manos', en la que podés dejar tu huella.

Increíble los stands dedicados a la tecnología, la robótica y a ciencias, como las matemáticas y la física.

La muestra dedicada a la Armada, Aeronáutica y el Ejército Argentino, con todos sus vehículos característicos, armamento y vestimentas, llaman la atención de los más pequeños.

Por su parte, Aerolíneas Argentinas tiene su avión gigante para que vivas un viaje increíble en una de las aeronaves de la empresa, pasando por la compra del boleto y comunicación con azafatas y pilotos.

Los mas peques disponen de varias plazas hermosas, con juegos y mucho color para divertirse todo el día; patios de comida con precios muy accesibles, plazoletas de descanso y músicos, todo para que pases un día totalmente entretenido.

Sus calles son para caminarlas sin ningún peligro, custodiada por el gigante de alta tensión, con su cara amigable cuando llega la noche.

No dejes de visitarlo; Tecnópolis te sorprende todos los años con cosas nuevas, y totalmente gratis.