Tim Wellens se adjudicó la sexta etapa del Giro de Italia, un trazado con final en puerto de montaña de 157 kilómetros disputados entre la localidad de Ponte y el Alto de Roccaraso en Aremogna. En lo que significó el regreso de la prueba ciclística italiana a Roccaraso tras 29 años, la expectativa estuvo puesta en lo que podía suceder en la primera etapa con final en alto tras una última subida de 17 kilómetros.
El belga al servicio del Lotto Soudal se impuso con un crono de 4:40'05", por delante del danés Jakob Fuglsang (Astana Pro Team) y el ruso Ilnur Zakarin (Team Katusha), quienes cruzaron la línea de meta a 1 minuto y 19 segundos del ganador. Wellens consiguió la victoria número 160 para Bélgica en el Giro, el segundo país con más triunfos en la Corsa Rosa tras Italia. El triunfo de una de las esperanzas del ciclismo belga, de 25 años, se concretó luego de sacar una ventaja importante al pelotón conformado por Dumolin, Valverde, Nibali, Chaves y Urán en la entrada de la montaña y abordó el ascenso final con poco más de 6 minutos de ventaja respecto Fuglsang, su más inmediato perseguidor.
La potencia y la ambición le permitieron al doble ganador del Eneco Tour y del Gran Premio de Montreal ser protagonista en la fuga del día para finalmente arribar en primer lugar a Roccaraso para no solo permitirle a su equipo la segunda victoria consecutiva tras el éxito de Greipel en la jornada de ayer sino también sacarse la espina luego de haber finalizado segundo en dos etapas del Giro en su primera participación en 2014.
Mientras el belga festejaba, los ataques al dueño de la ‘Maglia Rosa’ comenzaron a falta de 3 kilómetros para la llegada. En una reñida lucha, Fuglsang y Zakarin escoltaron a Wellens, mientras que el holandés Tom Dumoulin entró en la cuarta posición a un minuto y 22 segundos, resultado que lo mantiene en la cima de la clasificación general con ventaja de 26 segundos sobre Fulgsang y 28 segundos sobre Zakarin.
En tanto, el colombiano Esteban Chaves fue séptimo en la etapa y vuelve al Top 10 en una clasificación general en la cual los 13 competidores mejor posicionados se encuentran distanciados por menos de un minuto.
La lucha continuará este viernes con un trazado de transición de leve montaña que constará de 211 kilómetros y unirá Sulmona y Foligno en una ‘Corsa Rosa que podría albergar las primeras etapas de la edición 2018 en Japón, según sugirieron varias fuentes cercanas a una de las tres pruebas más importantes en el calendario de la Unión Ciclista Internacional.
Los inicios fuera de las fronteras italianas que datan del 2012 con partida en Dinamarca, 2014 en Irlanda y 2016 en Holanda, el territorio japonés estaría en los planes de un hólding empresarial, que habría propuesto la celebración de cuatro etapas del Giro en Asia, una de ellas en cercanías del mítico Monte Fuji. Pese a que la posibilidad existe, la mayoría de los jefes de equipo no ven clara la idea, sobre todo por la complejidad y el gasto que conlleva el traslado entre ambos países.