El lunes por la tarde Cristina Fernández de Kirchner sereunió con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon. La presidenta iba conun objetivo muy claro: pedir el apoyo de las Naciones Unidas en la lucha que elgobierno argentino está manteniendo contra los fondos buitre. Previamente, el día9 de septiembre, la Asamblea General de la ONU había adoptado una nuevaresolución para redactar un marco legal que permita la regulación de lasreestructuraciones de la deuda soberana. Esta resolución fue impulsada porArgentina y el G77 y China.

Y así, la reunión de la Presidenta con el secretario generalde la ONU está empezando a dar sus frutos: tal y como se dice en el titular,esta mañana fue aprobada en Ginebra una nueva resolución contra los fondosbuitre.

Dicha resolución ha sido presentada por Héctor Timerman. La resoluciónha sido aprobada por 33 votos a favor, nueve abstenciones y cinco votos encontra, entre los que se incluye, como cabía esperar, el de Estados Unidos.

El título de la resolución, aunque es bastante largo,resulta bastante aclaratorio: “Consecuencias de la deuda externa y lasobligaciones internacionales conexas de los Estados para el pleno goce de todoslos derechos humanos, sobre todo los derechos económicos, sociales yculturales. Las actividades de los fondos buitres”. Y es que el negocio de losfondos buitres es muy lucrativo para los grandes capitales financierosdedicados a la especulación.

Estos compran deuda de los países que están pasando por unasituación difícil, a un 20% del valor de la deuda en muchos casos.

Despuéscomienzan una serie de litigios internacionales contra los países deudores, conel objetivo de cobrar el 100% de dicha deuda. En Argentina operaron así y en2001, cuando estalló la crisis económica de Argentina, pretendieron que se lespagara el total de la deuda, oponiéndose a la reestructuración de la misma.

Desde entonces, el país está enfrascado en una serie delitigios que parece no tener fin.

La única solución es, sin duda, un acuerdo delos todas las naciones para regular la actividad de los fondos buitre, la cualatenta peligrosamente contra la Declaración Universal de los Derechos Humanos.