Violencia, pareciera que cada día aumenta y se vuelve mas común. Cuando prendes la televisión ves las noticias y en todas hay violencia, una mujer asesinada por su pareja; el testimonio de un chico que fue golpeado brutalmente por sus compañeros de escuela, cuenta a la cámara que estos chicos siempre lo molestaban; otro asesinato en ocasión de robo, la víctima nunca se resistió; otro tiroteo entre la policía y unos mal vivientes, una de esas balas mata a un tercero; otra chica desaparecida; otra chica que aparece muerta.

Apagas la televisión que te cuenta esas realidades que, quizás, no vivís, pero, de una forma u otra, te llegan.

En tu Familia también hay violencia, tus padres se pelean, por problemas de plata o porque ya no se aguantan, quizás solo tuvieron un mal día; tu esposo/a o novia/o está estresada/o y sin ningún motivo aparente se enoja con facilidad y te contesta mal, o al revés, vos sos el/la fastidioso/a, es muy común que llevemos los problemas a nuestra casa y nos descarguemos con los que más queremos. Agarras tu celular, abrís el Facebook y aparecen cientos de publicaciones de tus amigos con contenido político/ideológico, rara vez expresan su postura sin atacar a otros, y, si vez las tuyas, haces exactamente lo mismo.

Cansado de todo, salís a caminar por la ciudad, para despejar tu cabeza. Cuando llegas a la esquina ves a dos conductores, gritando e insultándose, alguno cruzó mal pero ninguno chocó, y recordás esa noticia que leíste en el diario "Discusión de tránsito terminó con un muerto".

Una muerte, sin sentido.

Mientras seguís caminando te encontrás con unos chicos sentados en una esquina, no tienen mas de 18 años, todos los días los ves ahí sentados, fumando marihuana. Y te acordás de algún amigo o familiar que empezó con las drogas y se arruinó la vida. Ahora esta tirado en alguna esquina sin estudiar ni trabajar, o, quizás, ya pasó a otra vida.

Volvés a tu casa y te preguntas si sólo es tu ciudad o tu país el que está así y evalúas la hipotética opción de irte a vivir a otro lado. Es ahí cuando te acordás del hambre y las guerras que existen, la crisis económica, las ciudades (y países) controladas por grupos de narcotraficantes, los actos terroristas, las personas perseguidas y asesinadas por su fe.

En ese momento te das cuenta que el mundo es violento, y lo aceptás. Luego de esa aceptación viene la pregunta ¿Cómo cambiarlo? Y el cambio está en pequeños actos, en pequeños gestos, incluso en una sonrisa, está en cada uno. El cambio está en vos.