Mostrar al mundo una piel luminosa, sana y con un efecto natural hace más relevante la imagen de miles de mujeres. En estos años creció la oferta de productos, si miramos bien, hay cantidad de cosméticos para cuidar la piel antes del maquillaje, todo tipo de artículos con fines diferentes: siliconados, con retinol, pre bases, bb cream, que prometen resultados translucidos, ligeramente mate, pero con luminosidad y resplandor.
Las últimas propuestas son las bases livianas, siliconadas, de efecto seda, para que la piel se vea natural y se sienta confortable.
Son mucho más elásticas, lo cual le da a la piel un efecto natural y duradero que resiste al correr de las horas. La base de maquillaje es esencial para mejorar la Belleza de la piel y hay diferentes tipos según las características de cada una y sus necesidades. Hay pieles que necesitan bases muy cubritivas porque requieren ocultar manchas y otras que solo tienen que unificar el tono de la piel.
Las bases de hoy tienen otra tecnología, perfeccionaron sus formulas y adicionaron aditivos como vitaminas o protección solar que hacen inmediata la luminosidad tan deseada por las mujeres. Consolidaron varios productos en uno, confiriéndole a la piel protección, prevención, tratamiento, maquillaje, hidratacion, y hasta efecto antiage ¿qué más podemos pedir?
Antiguamente las formulaciones y bases eran muy oleosas y pesadas, le daban al rostro un efecto de máscara, el cual quedó atrás en el tiempo. Hoy, en cambio, buscamos productos livianos y que nos den el efecto que queremos para vernos mejor, pero que nuestra piel respire, que sea duradero, confortable, accesible y no nos haga sentir tan cargadas de maquillaje.
¿Cómo elegir la base de maquillaje ideal para tu piel?
El primer paso es saber qué tipo de piel tenés. Si a tu piel la sentís seca o tirante elegí bases cremosas. Por el contrario, si tu piel es normal o mixta, preferí una base de maquillaje con una textura más fluida. Por último, si se trata de un tipo de piel grasa, las bases libres de aceite son las ideales para ella.
El segundo paso es elegir el tono adecuado para tu piel, yo siempre recomiendo probar la base de maquillaje en el rostro, porque en el cuello o la mano puede variar el tono. Si toman sol durante el verano tendrán que tener una base más oscura y otra más clara para el invierno.
El tercer y último paso sería hidratar la piel antes del maquillaje, para que la base corra mejor al aplicarla, utilicen menos producto y dure muchas más horas. La base la pueden aplicar con la ayuda de una brocha o esponja, siempre desde el centro del rostro hacia afuera o aplicando en puntos como la frente, nariz, mentón y pómulos. Extendiéndola bien para que luzca natural.
