Argentina venció al seleccionado de Jamaica por 1 a 0 en el encuentro que finalizó su paso por la primera fase del Grupo "B" de la presente edición de la Copa América Chile 2015, con gol de Gonzalo Higuaín a los 10 minutos de la primera etapa, encuentro que le permitió acceder a la primera fase de su grupo y clasificar a los Cuartos de final del tradicional torneo continental.

¿Por qué le pasa lo que le pasa a Argentina? ¿Por que sufre más de la cuenta? Primero aclaremos que no sufre gravemente, siendo apenas meros sobresaltos mínimos de sobre un total de 90 minutos posibles, 15 minutos malos..

ahora, por que pasan esos minutos malos?

Por la simple explicación de que no tiene definición. Si vos no definís, independientemente de quien sea tu rival, vas a sufrir. Es inevitable no sufrir, pues esto es así en este deporte dinámico, cambiante, y si no se liquida un cotejo, se sufre. Cuando el marcador es 1 a 0 a tu favor, ya no interesa que Alemania este enfrente, que Brasil sea tu rival o que tu oponente sea Tahiti. Un centro, un penal sin intención mal cobrado en tu contra, una pelota parada, un horror humano de mal pase habilitante al rival, todo puede ser susceptible de la nivelación matemática en el marcador.

Argentina tiene el arco cerrado: crea 20, convierte una. Pésimo, a trabajarlo.

Ahora bien... ¿Se trabaja acaso la definición? No, no se trabaja. Eso es algo que pasa en el encuentro. Es, sin más, el equipo de los 12 habitantes del torneo continental que peor promedio tiene en materia generación de oportunidades y concreción de las mismas.

La albiceleste choca contra varias cuestiones: su cansancio físico de los jugadores, muchos de ellos con desventaja física respecto del resto de los planteles existentes en la Copa América (Tevez, Mascherano, Messi, todos disputaron la Final de la Champions, definiciones de élite hace no menos de dos semanas reintegrándose a sus seleccionados a un par de días del inicio de la cita en cuestión).

Esa variable sumada al cansancio que impone el generar tanto y convertir tan poco (cansancio mental frustrante) y al ritmo que impone el estilo de juego de esta selección (con su impronta eléctrica, dominante, intensa en los inicios de cada juego). Todas cuestiones que hace que si el encuentro no se liquida tempranamente en relación con lo que mucho que se genera, al minuto 75 cerca del final de cada encuentro, se va inevitablemente a sufrir más.

Lo fundamental, que muchos no consideran ahora: Argentina no cierra en lo futbolístico, pero cierra los marcadores. Muchos campeones mundiales se han impuesto en sus encuentros por la mínima hasta que los goles más tarde que temprano llegaban. Lo que manda en el fútbol es ganar, y Argentina, mal que mal, gana. No gusta, no convierte tanto respecto de lo mucho que hace, pero triunfa. De eso se trata finalmente este deporte

No obstante, si quiere seguir en la competición continental y pretende estar tranquila en lo que a definición de partidos refiere, deberá concretar por lo menos el 50% de lo que colectivamente fabrica. Caso contrario, sera difícil, dada la futura calidad potencial de los contendientes a la Copa en cuestión, la concreción en hechos de esta tan ansiada, hace más de 20 años, nueva consagración a nivel Copa America en sus vitrinas.