La presidenta Cristina Fernández de Kirchner y Edward Snowden, mantuvieron una reunión secreta en Rusia en abril, cuando la mandataria hizo una visita diplomática a aquél país. Este suceso fue porque la misma supo que el ex topo de la CIA informó que efectivamente, el Reino Unido había espiado a la Argentina por las islas Malvinas.
Esta reunión fue confirmada por Antonio Romero, director ejecutivo de la American Civil Liberties Union (ACLU), y quien es uno de los abogados de Snowden. Dejo trascender que el ex espía de la CIA tuvo "una buena impresión de la presidente", y que Además confirmó Cristina "fue la primera Jefa de estado en visitar a Snowden".
Otra cosa que dijo, pero como impresión personal, es "por qué no se dio a conocer públicamente la reunión por parte del gobierno argentino", afirmó. De hecho ninguno de los funcionarios de esta gestión, consultados por varios medios, salieron a confirmar o desmentir lo sucedido.
Esta reunión también trajo polémica, ya que varios medios opositores a la gestión kirchnerista tildaron de "polémica" o de que podría "empeorar" o "enfriar" las relaciones diplomáticas de la Argentina con Estados Unidos.
Cuando el gobierno se dio por enterado de los actos de espionaje del Reino Unido, y por el malestar que causó, John Freeman, el embajador británico, fue convocado por el gobierno el 9 de abril para que diera las explicaciones del caso.
Snowden dejó trascender documentos a los medios sobre los actos de la inteligencia británica. Este llevó el nombre de "Operación Quito", el que supuestamente consistía de espionaje de telecomunicaciones y la intervención de las redes sociales, lo cual serviría para moldear la opinión sobre el conflicto respecto a la soberanía de las islas.
El Reino Unido considera a la Argentina un aliado de Irán desde 2010 por el gobierno de David Cameron, y sospecha un intercambio nuclear entre ambos países. Fue a partir del pacto para destrabar la causa del atentado a la AMIA, considerado "polémico".
Los motivos por los cuales se cuestiona esta reunión son varios. Entre otros por ser secreta y no darse a conocer públicamente; o también porque Snowden fue declarado criminal por parte del Departamento de Justica norteamericano.
Desde entonces el ex espía ha intentado en vano regresar a ese país, ya que de hacerlo seguramente será procesado, según dicen, por "poner en riesgo la seguridad de los norteamericanos". Lo cierto es que la vida de Snowden también correría riesgo al revelar un secreto de estado de uno de los países más poderosos del mundo.