Inaugurada en noviembre pasado, Warlords of Draenor ya ha perdido, de modo brutal, alrededor de 3millones de suscriptores en 3 meses –de febrero a la fecha– y sigue en caída. Seencuentra con un total de 7.1 millones activos, menos que la baja registrada enMists of Pandaria. La ola desuscriptores subió a un pico inesperado de 10 millones con el anuncio de lanueva expansión, llegando así al techo máximo de jugadores que habría tenidodurante sus dos expansiones –a mi parecer– más brillantes, intensas yversátiles de todas: The Burning Crusadey Wrath of the Lich King.

Y es cierto. Nos prometieron el oro y el moro. Durante el mesanterior a su estreno, Blizzard-Activisionnos saturó con documentales, videos animados bien logrados, con las historiasde los principales clanes orcos de Draenor,sumado a la novedad del remodelado de las razas más viejas de Azeroth… Pero,evidentemente, “no es oro todo lo que reluce”, y el moro se habrá perdido poralgún lado... Pese a que desechó, en parte, algo de la linealidad obligatoria desu predecesora –ya que hay que pasarse las misiones, mapa por mapa, para obtenerseguidores de ciudadela, planos, logros y demás–, WoD no deslumbra. Esto sedebe a varias razones:

Las Ciudadelas. Aquí ejercemos las profesiones, subimosde nivel a nuestros seguidores por medio de misiones, a cambio de recompensas;la elaboración de objetos y misiones diarias para la obtención de otrasrecompensas, como otros seguidores, monturas, logros.

Blizzard le ha dedicadomucho empeño a las ciudadelas, pero lo cierto es que resultan tediosas y no sonoptativas, puesto que si se decide no hacerla, nuestro personaje acarrea una considerablecarga negativa en su desarrollo. WoD se está asemejando aún más al viejo Farmville.

Las profesiones. Han perdido brillo y trabajo. Ahoracon solo realizar los encargos a tus seguidores y practicar un par de patrones,podés subir de 1 a 700 sin mucho esfuerzo.

Sin mencionar, además, la pocavariedad de materiales y recetas.

Falta de contenidogeneral. Han pasadoya 6 meses desde su lanzamiento, y el nivel de contenido agregado con losparches es prácticamente nulo. Las mazmorras son las mismas desde su inicio ysólo se ha añadido 1 banda. Con el nuevo parche 6.2, se espera una banda más,refrito de las mazmorras de BC y un nuevo mapa: Tanaan.

Muchos pensarán: “Con derrotar a Archimonde, ¿ya está?”

Desbalance depersonajes. Pese alos cambios en las clases, las hay unas mucho más favorecidas que otras, comoel DK Frost y el Druida Feral. No hay manera que, en PvE, un Sacerdote Sombras o un Brujo Demonología igualen en daño alos dos mencionados, o a un Cazador.

La facilidad de leveonivel 1-90. Ya nadiehace ni lee misiones en estos niveles. El lorede esta etapa ha muerto. Sólo con apuntarse al buscador de mazmorras, el jugador obtendrá equipo de manerasencilla, oro y mucha experiencia.

Y a todo esto, sumarle unos pequeños detalles: El abuso demisiones diarias y la falta de variedad en los sets, debido a la herramienta detransfiguración. Parece como si ya no importara el diseño del equipo, puesto queBlizzard confía en que los jugadores lo transfigurarán de todos modos. ¿Será laexpansión más corta de WoW? Eso aúnestá por verse.