A lo largo de los años, Carlos Rodríguez adquirió diversos alter ego: Nekro, Voom Vaan Kinder, Il Carlo, El Principito hardcore, o Boom Boom Kid. Pero si algo ha mantenido en el transcurso del tiempo es aquella noción de lo alternativo y de la autogestión que había instaurado en los 90 cuando lideraba a Fun People. “Hago las cosas de a poco, con los medios que tengo. Y cómo yo hago todo, entonces se hace muy difícil”, explica el músico, de 43 años.
La relación de BBK con la música trasciende el plano laboral e, incluso, vas más allá del plano terrenal: “La Música representa todo en mi vida. La música me llevó a viajar, a conocer gente. Por la búsqueda de música me fui a otro pueblo porque sabía que un pibe tenía tal disco. Todo lo que conozco es gracias a la música. Todo lo que tengo, se lo debo a la música, hasta mi vida porque estoy vivo gracias a ella”.
Este vínculo, que había comenzado tempranamente a partir del contacto con los discos de sus padres, más tarde tuvo un quiebre trascendental.“Cuando escuche por primera vez V8 sentí que esas canciones hablaban de lo que yo estaba viviendo.
Las letras de V8 me hicieron sentir que no estaba solo. Para un niño de 11 años, que en ese momento le empezaban a surgir un montón de dudas, fue muy importante”.
Boom Boom Kid acaba de editar un EP titulado “El destino de los malditos”, cuyo primer corte exhibe la faceta más visceral y explicita de la banda mezclada con la honestidad de siempre. “Había una necesidad de expresarlo así. Si no soy yo en mis canciones, ¿qué voy a decir ahí?. Yo no tengo nada que vender, salgo a la calle a decir lo que me plazca y tengo la música. Yo siento eso. El disco salió con urgencia porque quería sacarlo antes de las elecciones y ahí está en la calle”, expone.
El tema “Gato encerrado” tiene su videoclip que fue filmado y dirigido por el mismo Nekro y exhibe el fanatismo del cantante por el mago Fu-Manchú.
“Tenía ganas de contar la historia para que no se apague la vela de Fú, que me dio tantas alegrías”. Protagonizado por el mago Ferlin, que realiza las mismas sombras chinescas que hacía el legendario Fu-Manchú, el video tiene un mensaje implícito: “Busqué la manera de ampliar lo que quería decir por medio de imágenes, por eso en todo momento las manos se transforman y no son lo que ves. Y termina con un broche de oro”.
Boom Boom Kid se presentará el próximo sábado 24 de octubre, a las 18, en Groove de Palermo (Avenida Santa Fe 4389).