La cita fue a las 21 horas y como buena inglesa que presume Lisa Stansfield salió puntual al escenario y desde el principio lo dejo claro: “Everybody get up, let’s gonna dance tonight and have a great time!”, y es que ella tiene como premisa divertir a su público.
Comenzó su última gira en 2014 que la ha llevado por distintos escenarios; Dinamarca, Francia, Italia, Polonia, Inglaterra, República Checa, Austria, Bulgaria, Luxemburgo y España.
Este año por suerte ha sumado Latinoamérica, tocando en Brasil, Chile y nuestro país para celebrar 26 años de carrera como solista.
De piel blanca posee una fuerte y seductora voz de alma de color que aun sabe mantener con seguridad y belleza a sus 50 años. Conquisto desde un principio la sala casi colmada por un auditorio fiel y adulto que siguen a la artista desde sus inicios, a fines de los 80’s, su música gira en base al soul y al R&B. Una cita fantástica para repasar sus excelentes canciones, y pese que su gran momento de éxito fue la década de los 90’s, mantiene una sólida carrera con más de 30 millones de álbumes vendidos y exitosos números unos a nivel mundial.
Durante el show que duro más de 90 minutos, interpreto 19 temas junto con una poderosa banda integrada por 10 virtuosos músicos, sorprendió con su voz potente, limpia, soltura y un setlist variado En su repertorio no faltaron hits como “All Around The World”, “The Real Thing”, “Change” y “This is The Right Time”, “People Hold On” de Coldcut, “The Real Thing” y una gran versión del tema de Barry White “Never Never Gonna Give You Up”, clásicos junto a las canciones de “Seven”, su último trabajo editado en el 2014, más un tema inédito “Lay me down”, brindado como sorpresa durante el show.
Finalizaría con “The Rain” canción también de su disco Seven, demostrando una vez más el fuerte potencial de su voz y culminando con unas notas altas, festejada por el público y agradeció la bella velada más la simpatía del auditorio desapareciendo por la izquierda del escenario.
Minutos después regresaría para hacer el cierre definitivo con “Love Can” también de Seven, una canción soul y a medio ritmo que homenajea al amor y sus encrucijadas. Para el final se guardó uno de las canciones más bellas de su carrera, “Live Together” (3er sencillo de Affection 1989). Fue una noche fantástica para disfrutar sus letras, su música, su voz y su presencia. Esperemos que se repita en poco tiempo y no volver a esperar casi 18 años como esta vez.