Las cenizas del volcán Calbuco llegaron esta mañana a Bahía Blanca y se espera que en las próximas horas alcancen a la Capital Federal. Este fenómeno, junto con complicaciones a nivel de la salud, le trae aparejado a los automotores un sinfín de problemas. Por este motivo es que se han difundido en Internet una serie de tips para cuidar a nuestros rodados.
Las cenizas volcánicas están compuestas de diferentes sustancias muy dañinas para el automotor, entre los cuales podemos mencionar pequeñas partículas de roca, lava petrificada, vidrio y azufre. La conjunción de estos elementos, junto con su alto nivel de acidez, la convierten en un enemigo que atenta contra la pintura, vidrios, filtros de aire, elementos de goma, etcétera. La limpieza inadecuada de estas piezas puede conllevar a desperfectos tanto estéticos como funcionales muy costosos de reparar.
- Limpiar con cuidado cada superficie, utilizando una aspiradora primero. Remover la mayor cantidad posible de cenizas poniendo especial cuidado en las rendijas y hendiduras del coche.
- Usar agua limpia para completar la tarea de remoción.
- Lavar la carrocería utilizando un champú de ph neutro; esto anulará los componentes ácidos de la ceniza.
- Limpiar la misma con una esponja suave, intentado que se mantenga siempre mojada, para que una fina capa de agua lubrique y proteja el auto.
- No enjuagar los elementos de limpieza en baldes; las partículas de ceniza pueden volver a adherirse en cada enjuague, de modo que se corre el riesgo de rayar pintura y cristales.
- Ser especialmente meticuloso con las escobillas de los limpiaparabrisas; un resto de cenizas en dicha área puede causar rayones cuando estos se pongan en funcionamiento.
- Utilizar ceras o cremas pulidoras en la carrocería; esto agregará una capa extra de protección.
- Asear con cuidado los burletes y neumáticos con elementos para limpieza y tratamiento de gomas.
- Secar el vehículo con paños de microfibra de buena calidad, o de cuero sintético.