En una reunión que se realizó con varios periodistas invitados, el secretario de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) y obispo de la Diócesis de Chascomús, monseñor Humberto Malfa, se pronunció en contra de la 'farandulización' de la política que, según dijo, es penosa porque no permite que se den a conocer los proyectos de cada candidato y, por lo tanto, no se puede percibir un futuro en el que esté favorecida la construcción de la dignidad humana. La CEA pidió también que todos los partidos políticos dejen las diferencias de lado y se unan en la lucha contra cuestiones que afectan a todos como son, por ejemplo, la trata de personas, el tráfico de drogas, el desempleo, la desnutrición y la pobreza extrema.
Malfa explicó a los asistentes que el diálogo no es de ninguna manera un signo de debilidad o cobardía sino, por el contrario, una señal de grandeza. Pidió también que la Nación Argentina haga un examen colectivo de conciencia mirando y analizando el pasado, pero también proyectándose en el futuro y pensando hacia dónde se quiere ir, tanto en lo nacional como en el contexto mundial.
En el documento presentado se dedican varios párrafos a la corrupción en los que se señala que es posible ser un gobernante argentino sin necesidad de usar los privilegios que otorga el ejercicio de un cargo público para enriquecerse ilícitamente. Además se aclara que los funcionarios públicos deberían ocupar posiciones que sean acordes con sus méritos profesionales y de ninguna manera, como muchas veces ocurre, a causa de afinidades personales, ideológicas o para hacer estrategias pensando en próximas elecciones para perpetuarse en el poder.
La reunión con periodistas fue realizada con el fin de dar a conocer las orientaciones de la Iglesia Católica Romana que intentan hacer que la feligresía camine siguiendo los consejos del Papa Francisco pero la mayor parte del tiempo se ocupó en explicar la visión de la mencionada institución religiosa sobre los procesos electorales que se están viviendo en todo el país.
Sobre estos temas, monseñor Malfa ya se había pronunciado en varias ocasiones, entre ellas en el mensaje de Pascua que pronunció en Chascomús durante la pasada Semana Santa. Allí explicó que contemplar a Jesús resucitado es algo que debe impulsar al creyente a tener un mayor compromiso social y una verdadera responsabilidad para así profundizar colectivamente el bien común, la convivencia mutua y el respeto por la dignidad de todas las personas.
