Con un equipo plagado de suplentes, el Real Madrid cerró el año cayendo dramáticamente por marcador de 4-2 ante el Milán en partido celebrado en la ciudad de Dubai. Los rossoneros le abollaron la "corona" a los campeones del Mundo.

En descarga del Madrid debemos decir que de los habituales titulares sólo iniciaron Isco y Cristiano Ronaldo. El técnico merengue Carlo Acelotti, había advertido que para este partido donde sólo se atendían intereses comerciales no mataría a sus jugadores y por ello utilizó mayormente a suplentes.

La situación fue bien aprovechada por Filippo Inzaghi y sus muchachos, quienes salieron a la cancha a comerse auténticamente al rival y no les importó abollarles la Corona de Campeón del Mundo a los madrileños.

Así las cosas el equipo blanco cerró un gran año dando pena. Los once que iniciaron jugaron desenchufados y dando clara muestra de que el partido disputado en Dubai no tenía nada en juego, aunque se les olvidó que el prestigio cuenta en cualquier escenario.

Los rossoneros se fueron al frente a los 24 minutos, aprovechando un grosero error de Nacho, quien al intentar regresar la pelota atrás, dejó a Jérémi Ménez mano a mano ante el arquero tico Keylor Navas quien no pudo hacer nada para detener el disparo del jugador francés.

Los suplentes merengues jugaban sin la intensidad acostumbrada y parecían dormidos, muestra de ello fue que siete minutos más tarde, cayó el 2-0 en una jugada de Stephan El Shaarawy quien tomó el balón y desde fuera del área sacó un tiro raso que se clavó pegado al poste derecho del marco defendido por el guardameta costarricense.

El Madrid intentó reaccionar y al 35', en una gran jugada de Isco quien arrastró la pelota desde atrás de medio cancha y entre cinco defensores sirvió para Cristiano Ronaldo quien desde fuera del área colocó su disparo al costado izquierdo de Diego López para poner el 2-1.

Para la segunda parte, Ancelotti movió sus piezas intentando regresar a la pelea así hizo ingresar a Casillas, Kross, Benzema y Bale.

Sin embargo, al 48' recibió el 3-1 en una jugada donde nuevamente la zaga blanca careció de atención y eso fue aprovechado por Stephan El Shaarawy, quien dentro del área enemiga recibió el balón y lo mandó a guardar al fondo de la portería de Casillas.



La goleada se consumó al 73', cuando Giampaolo Pazzini apareció a segundo poste y cerrando la pinza remató de cabeza para el 4-1 ante la apacible marca de la zaga blanca. Todavía los merengues encontraron un segundo gol mediante una pena máxima que Karim Benzema cambió por gol.

Para ser honestos, no se puede dramatizar, ni tampoco hacer una tormenta por esta derrota del Real Madrid, que cumplió simplemente cumplió con jugar un partido de mero trámite en Dubai.