No logró tener un destacado desempeño en el torneo, pero tras llegar a primera luego de dos ascensos consecutivos son valiosos los puntos que cosecharon en la competencia local, y dejó la imagen de ser un equipo guerrero que intentará conseguir en las próximas actuaciones el puntaje que le falte para permanecer entre los de la primera división del Fútbol argentino.
Los de Lomas de Zamora, dirigidos por Ricardo Rezza, ganaron tan solo cuatro encuentros, empataron cinco partidos, y perdieron seis enfrentamientos, alcanzando únicamente 17 puntos, con una diferencia de dos goles en contra, contabilizando a favor 11 tantos, y 13 goles en contra.
Temperley arrancó la competición con una victoria ante el Banfield de Matías Almeyda como visitante por 1 a 0; posteriormente, debutó como local en la primera división nada menos que frente al Boca Juniors, de Rodolfo "el Vasco" Arruabarrena, y fue derrotado por 2 a 0; en la tercer fecha le tocó otro grande, Racing Club de Avellaneda, y en el cilindro los locales se impusieron por 2 a 1; empataron frente al duro Tigre de Gustavo Alfaro por 1 a 1; luego el Rosario Central del "Chacho" Coudet se impuso como local por 1 a 0.
El plantel dirigido técnicamente por Ricardo Rezza continuó la parte posterior del torneo del fútbol argentino, Julio Grondona, con un empate a cero frente a Olimpo de Bahía Blanca; frente a Crucero el Norte perdió 1 a 0; empataron 1 a 1 ante Atlético Rafaela; luego como locales ganaron 2 a 1 ante Colón de Santa Fe; y volvieron a conseguir otro triunfo en Florencio Varela ante Defensa y Justicia, por 1 a 0.
En los subsiguientes enfrentamientos del campeonato Temperley perdió como local ante San Martín de San Juan por 1 a 0; luego perdió nuevamente frente a Estudiantes de La Plata por 2 a 1; empataron 0 a 0 con Huracán de Parque Patricios; le ganaron 2 a 0 a los últimos del campeonato, Nueva Chicago; y cerraron los partidos disputados empatando, antes del receso por la Copa América, 1 a 1, ante el granate Lanús de los mellizos, Gustavo y Guillermo Barros Schelotto.
Los de Ricardo Rezza jugarán los próximos encuentros ante River Plate; luego será el turno de otro grande, el rojo Independiente de Avellaneda; en Mar del Plata frente a Aldosivi; más tarde, Vélez Sarsfield de Miguel Ángel Russo; en Rosario frente a Newell´s Old Boys; Sarmiento, el verde de Junín; y el cervecero Quilmes de Julio César Falcioni.
Los rivales que le restarán enfrentar antes de culminar el torneo serán Belgrano, el pirata cordobés; nuevamente Quilmes, quien la Asociación del Fútbol Argentino dispuso como clásico rival; Unión de Santa Fe; Arsenal de Sarandí; el tomba mendocino Godoy Cruz; Gimnasia y Esgrima de La Plata, el lobo del bosque; San Lorenzo de Almagro, en la anteúltima fecha; y Argentinos Juniors para cerrar la competición.