La tensión de una historia de dos horas y quince minutos plasmó un resultado heroico para Argentina, que inició el partido ganando el primer set, cayó en los dos siguientes y, cuando parecía abatido, se recuperó en el cuarto con una remontada que remató en el tie-break.

El equipo de voleibol masculino albiceleste derrotó por 3 sets a 2 (25-23, 18-25, 19-25, 25-23 y 15-8) a su clásico rival Brasil en la final de los Juegos Panamericanos de Toronto y obtuvo la medalla dorada en esta disciplina luego de 20 años.

Los de Julio Velasco se llevaron un primer set muy parejo, pero ante errores propios en la recepción y virtudes ofensivas de los brasileros el transcurso del juego se les había dado vuelta.

Fue en el cuarto parcial cuando se revirtió la tendencia. En la definición, las actuaciones individuales de Facundo Conte (el máximo anotador del juego con 23 y Jugador Más Valioso del torneo) y Maximiliano Gauna fueron determinantes para lograr la diferencia que el campeón panamericano pudo controlar hasta el fallido saque de Murillo, que sentenció el 15-8.

Argentina alcanzó la decimoquinta medalla dorada en estos Juegos de Toronto. El voleibol obtuvo su segundo oro, veinte años después de los Panamericanos de Mar del Plata y pudo derrotar a la selección de Brasil luego de 15.

Ganar con mi país produce otra emoción

Julio Velasco es un entrenador reconocido mundialmente. Bicampeón del mundo, medalla de Plata en los Juegos Olímpicos de Atlanta '96 y cuatro veces ganador de la Liga Mundial.

Todos títulos logrados con Italia.

Pero retornó a su país con un objetivo. "Siempre creí estar en deuda con la Argentina. No la saldé. La saldo brindándole toda la experiencia que tengo", reconoció a radio Vorterix luego del logro de su equipo el pasado domingo.

"Pensaba estar unos años en Europa y volver, y me quedé 33", añadió Velasco.

Luego de clasificarse al Final Four en la Liga Mundial, la ambición era alcanzar el podio en los Juegos Panamericanos de Toronto.

Con el oro conseguido, el entrenador explicó visiblemente emocionado que "es distinto con mi país. Cuando se levantó la bandera, era la mía. Y soy argentino, y ver mi bandera, escuchar mi himno en una victoria es la primera vez que me ocurre".