Después de la tormentosa caída que sufrió Boca de local frente a Unión, ayer logró levantar en Sarandí. De la mano de su máximo ídolo, Carlos Tévez -quien fue la figura del partido- recobró lo que había perdido; la circulación precisa y una defensa solida.

Los xeneizes fueron muy superiores a Arsenal en todo el partido. Supieron cómo manejar la pelota, se adueñaron de ella y atacaron al rival con eficacia. En lo que la previa parecía un encuentro duro, terminó siendo un partido fácil para Boca, que le encontró la vuelta y se llevo 3 puntos clave para seguir en la cima del Torneo Julio Humberto Grondona.

El resultado fue mentiroso. No le cobraron dos goles a Palacios por supuestos fuera de juegos, que no existieron.

El primer gol llegó de pelota parada a los 29 minutos del primer tiempo, del sector derecho de la cancha. Tévez se hizo cargo del centro y lo ejecutó a la perfección. La pelota fue al segundo palo, donde apareció Gago que cabeceó a las manos del arquero. El rebote quedó en el área y lo aprovechó Pérez para poner el 1 a 0.

Ya en el segundo tiempo con pases veloces y profundos, Boca era más que su rival, quien solo buscaba el gol mediante una contra o pelota parada. A los 22, luego de que Tevez, la figura del partido, pelee una pelota que solo él sabe pelear, vino el segundo del local.

Logró sacarle la pelota al defensor central de Arsenal y metió un pase al segundo palo para que por el medio entre Calleri y empuje la pelota, poniendo el gol que liquidaba el encuentro. Aunque al último minuto Luna convirtió el gol para la visita, que poco sirvió porque el árbitro del encuentro, Mauro Vigliano, decidió finalizar lo que fue una victoria clave para Boca.

El equipo del vasco sacó adelante un buen triunfo y dio una muestra de carácter sabiendo que San Lorenzo había ganado su partido y que solo el triunfo era lo que servía. Para el próximo partido contra Godoy Cruz en la Bombonera tendrá que ajustar algunas tuercas sueltas en la defensa para no dejar pasar puntos importantes de local.