Desde los últimos años de esta década, el Boom de la alimentación y modo de vida del veganismo a ingresado a nuestro país, generando muchas preguntas en torno a la honestidad de muchos de los seguidores, en relación a prácticas serias que involucran a la función de los animales (no humanos) en el centro de la Industria capitalista.
Las bases fundantes de la ideología vegana tiene que ver con el establecimiento de un modo de vida menos egoísta en donde se elimina completamente el consumo de elementos que involucren la explotación o diversas prácticas en torno al uso de animales.
Esto incluye la eliminación total del consumo de productos de origen animal tanto en la dieta como en la vestimenta, cosmética, y cualquier otra actividad que involucre elementos de este origen.
La doctrina vegana se funda en la igualdad y el respeto por todos los animales, tratando de eliminar la discriminación de los animales- no humanos- por parte del hombre (término denominado especismo).
Es cierto que la promesa de una sociedad que involucre una dinámica más justa en nuestra relación con la naturaleza es sumamente atractiva, sobretodo si pensamos en los cambios no tan óptimos que venimos imponiendo en el mundo haca ya incontables años (tales como la tala indiscriminada, la de-forestación, la explotación minera, entre otros).
Lo cierto es que lo que genera controversia en este aspecto es la puesta en jaque de la honestidad en torno a los cambios de hábitos de muchos de los simpatizantes de ésta ideología y los métodos impositivos de muchos (sin ánimos de generalizar) para establecer un cambio sustentable en la sociedad en general.
El veganismo se ha impuesto, sobretodo en estos últimos años, de un modo global.
Aunque en nuestro país en particular todavía se generen algunas dudas en torno al nombre y las prácticas relacionadas con el mismo.
A nivel mundial, se han experimentado crecimientos calculables en cuanto a los lanzamientos de alimentos orientados a vegetarianos y veganos, así como la ampliación de menúes en restaurantes que cada vez tienen más en cuenta los requerimientos de los sujetos que albergan este modo de vida.
En otros sectores de la industria tales como la moda, y la estética, también se han experimentado avances en la aparición de productos, desde la cosmética hasta la vestimenta, que incorporan tanto materiales como prácticas "cruelty free" en sus métodos de producción. Es cada vez más frecuente el uso de materiales sintéticos para la confección de indumentaria, y el reemplazo de elementos de origen animal por otros (sintéticos o vegetales) en el desarrollo de cosmética y productos del cuidado personal tales como cremas, jabones o maquillaje, entre otros.
El verdadero interrogante aquí se encuentra en la determinación de las "intenciones" de muchos de los auto-proclamados "veganos" y las verdades detrás de su cambio a este estilo de vida.
Aquellos que han escogido este modo de vida por su cualidad de "novedoso" son más proclives a no saber como sostener este cambio radical en sus vidas. Muchos son los casos, de estos individuos que ingresan en los calificativos del llamado "vegano" sin haber desarrollado una búsqueda real de información en torno a las bases fundantes de este estilo de vida, ni de como mantener un nivel de Salud realizando los cambios que sean necesarios para el cuidado de uno mismo.
La exclusión de uno mismo en pos del cuidado de los animales "no humanos" no tiene lógica en absoluto, ya que el hombre es un animal que debe ser cuidado, empezando por uno mismo. Muchos sujetos que llamaremos de ahora en más "wanabes" de veganos no tienen una fundamentación real del porque de su cambio de hábitos y menos aún saben como mantener este estilo de vida en el tiempo.
Muchas veces, la culpa de esta cantidad de sujetos completamente desmotivados pero susceptibles a realizar estos cambios extremos en sus modos de vida proviene del segundo factor de importancia en torno a esta nueva ideología, esto es, la manera de transmitir el mensaje.
Más y más nos encontramos con formas impositivas en la transmisión y enseñanza del mensaje vegano, cuestión que considero no fructífera en cuanto a las ganancias de nuevos y más seguidores de estas prácticas, y que asimismo provocan la suma inminente de personas poco comprometidas que se han "convertido" al veganismo luego de ser partícipes de varios sucesos en donde son sobre-dosificados con información y golpeados mental y visualmente con realidades que hasta entonces ignoraban.
En mi caso, encuentro fascinante y completamente válido el argumento que sustenta el modo de vida vegano, considero que lo que no está funcionando es el modo de transmisión de tal mensaje, cosa que conlleva directamente al aumento de la "cantidad" y no la "calidad" de seguidores y practicantes de esta doctrina.
el fundamentalismo y la poca tolerancia de las grandes elites veganas está conllevando a que el aumento de "veganos" sea en cantidad de sujetos poco comprometidos, y a su vez esta llevando a un aumento ña hostilidad de sujetos no veganos en torno a cualquier práctica dentro de la doctrina.
En conclusión, la violencia y dosificación de la información y su transmisión no está funcionando y es lo que esta alterando la manera en la que vemos a los veganos, mitificando sus prácticas y etiquetando a todos aquellos que llevan a cabo este modo de vida como seguidores de una moda sin fundamentos, o con hábitos impositivos y pocos amables para con los que se encuentran al margen de este mundo.