Una innovación tecnológica sin precedentessi pensamos que hay cerca de unos 15 millones de bebés al año que nacen antes de lo debido (prematuros).Esta es la afirmación de laOrganización Mundial de la Salud queademásestá lanzando una advertencia preocupante sobre los niños prematuros. Según la OMS, un millón de niños prematurosmueren de hipotermia, una delas complicaciones que siguen al momento del nacimiento en estos casos.
Si hubiera la posibilidad de tener unaincubadora sencillasepodrían salvar muchas de estas vidas, pero el costo de esta maquinaria hasta día de hoy era demasiado exorbitante y eso hacíaquefuera unobjeto para unos pocos, e incluso sólo para hospitales en según que países del mundo.
Por esta razón, el joven inglés de tan sólo 23 años de edad, James Roberts, graduado en tecnología de diseño en la Universidad de Loughborough, diseñó la incubadora Mom (mamá), una incubadora innovadora que se puede comprar a un precio de sólo unos 300 euros, cosa que la hace mucho más asequible que las que había hasta día de hoy.
Roberts explica que la idea le vinoviendo un documental en la televisión, donde interpretó las condiciones inhumanas a la que se enfrentan, todavía, los niños sirios después de nacer, que mueren por falta de incubadoras en los hospitales turcos. "Así que empecé a estudiar las incubadoras que se utilizan en los hospitales para entender cómo podía producir una versión similar pero con sólo lo necesario para reducir costes".
¿Resultado de este pensamiento? Una incubadorainflablepionera en todo el mundo, de manera que se puede transportar fácilmente. Calienta debido a la resistencia térmica de cerámica y utiliza ventiladores similares a los de unPC, que impide que el calor crezca demasiado rápido. Está equipada también por una alarma precisa y tecnológica que advierte en casodeque el calor seadiferente de la temperatura fijada previamente.
Perfecta también para los hospitales que se encuentren en zonas de guerra o por falta de corriente eléctrica. La Mom puede funcionar con baterías que duran 24 horas y que se pueden recambiar y recargar.
En un par de años quieren producirlas en masa para que más gente pueda usarla. El joven Roberts ha ganado el premio nacional de invención, el Premio Dyson Award, y asegura que invertirá el premio de treinta mil libras para cumplir con los requisitos legales y para asegurarse de que el equipo se utilice en todos los países que lo necesitan.