El hundimiento de un barco en el que viajaban 350 migrantes, ocurrió este jueves en el mar Mediterráneo. Los equipos de salvamento italianos efectuaron una llamada de emergencia para alertar sobre la situación a los buques cercanos.
De acuerdo con la información de La Jornada en Línea, la Guardia Costera italiana, encargada de la coordinación de los operativos de rescate en el Mediterráneo, ha informado del salvamento de 130 náufragos hasta el fin de la tarde; y, continúan con las tareas de búsqueda en la zona.
El arribo de numerosos inmigrantes a Italia desde Libia es constante y se producen accidentes frecuentes en alta mar, debido a las condiciones precarias en las que se trasladan los viajeros. Durante la última semana, más de 10.000 personas han sido socorridas en el mar, frente a las costas libias; y, tan sólo en el transcurso del viernes, quince barcos fueron avistados en situación de peligro en las aguas del Mediterráneo.
En efecto, esta semana se produjeron dos naufragios en la misma región, que dejaron como saldo centenas de muertos, lo que coloca en primer plano la tragedia que continúan viviendo miles de inmigrantes, que a diario intentan atravesar el Mediterráneo, en busca de una vida mejor.
Este lunes, cerca de 2000 refugiados fueron rescatados por los guardacostas en el Mediterráneo y, según El País, otros 14 navegantes, se dieron por desaparecidos, tras el hundimiento de la barca en la que intentaban llegar a Italia en las primeras horas del domingo.
La afluencia de navíos desde Libia hacia Italia, es común y se desarrolla, generalmente, en periodos tranquilos y alternados, con salidas masivas de refugiados. Sin embargo, esta semana hubo un aumento en el flujo de embarcaciones, debido a las condiciones climáticas favorables. Vale decir, que durante los últimos dos años, la llegada de inmigrantes a Italia por el Mediterráneo se mantuvo estable.
De acuerdo con las estadísticas de la Cruz Roja, desde comienzos del 2016, han llegado a Italia 37 mil 785 personas.