Se acaba de presentar en Madrid un informe elaborado por la Organización No Gubernamental Oxfam Intermón un informe que analiza las desigualdades sociales, principalmente económicas, que aquejan a la población mundial. Dicho informe, avalado por personalidades como Kofhi Anann, ex Secretario General de naciones Unidas, fue presentado simultáneamente en 50 países y se puede acceder al mismo y obtenerlo en formato PDF ingresando en la página de internet de la ONG que venimos mencionando por su nombre " Desigualdad Extrema: es hora de cambiar las reglas".
Entre sus conclusiones más inquietantes sobresale la creciente desigualdad económica y social entre cada vez menos personas con mayor riqueza y más número de personas empobrecidas. Dicho de otra manera la tendencia de la economía global es hacia la concentración de empresas y riquezas en desmedro de un reparto equitativo entre los diferentes estratos sociales que conponen a una sociedad. Según el informe de Oxfam Intermón las mayores riquezas del mundo estarían concentradas tan solo en unas 85 personas.
América Latina y el Caribe, siempre según el informe que venimos detallando, y a pesar de que ha avanzado mucho en lo que a combatir la pobreza se refiere, pongamos por caso nuestro vecino Brasil, todavía tiene mucho trabajo por delante para reducir desigualdades puesto que el número de millonarios aumentó casi hasta un 38% en el último año.
Por otra parte las personas más ricas se quedan con casi el 50% de los ingresos totales en toda la región, y a los pobres les corresponde apenas un 5% de beneficios.
También el informe advierte de la desviación de fondos de las empresas con sede en Latinoamérica y Caribe hacia paraísos fiscales o cuentas opacas. Por ejemplo desde México se evaden un 46% de las ganancias anuales hacia cuentas foráneas, en el Ecuador se trataría de un 65% de los beneficios empresariales los que van a parar a fuera; solo por citar dos ejemplos, el resto de países y las cifras correspondientes pueden consultarse en el informe disponible en internet.
El informe de Oxfam Intermón resulta bastante desalentador puesto que a nivel global afirma que la desigualdad social, el incremento de la pobreza y el riesgo de exclusión social de muchas poblaciones actuales que ya no pertenecen al tercer mundo, sino que se hallan en Europa y América, se vienen incrementando desde los últimos treinta años hasta la fecha.
Los expertos de esta ONG encargados de realizar el mencionado informe global remiten las causas de las desigualdades económicas y sociales en varias causas, pero hace hincapié en la concentración de las riquezas y la consiguiente generación de monopolios que hacen funcionar las economías de los estados acorde a sus propios intereses y necesidades. El informe, además de buscar y analizar las causas de la creciente desigualdad global tiene un aspecto positivo puesto que propone "cambiar determinadas reglas de juego" en lo que hace a las políticas de gobierno y a las economías de mercado sustituirlas por otras más democráticas con una justa redistribución de las riquezas en beneficio de todos los ciudadanos y no solamente, y exclusivamente, de pequeños grupos empresariales.