La historia de "Cromosoma 33" nos presenta un tema muy actual y desconcertante para la mayoría de los integrantes de nuestra sociedad. La llegada de un bebé en el seno de una familia singular. Dos mamás y un amigo, padre biológico del recién nacido sostienen un conflicto por tenencia del menor.

La comedia dramática -creada y dirigida por Martín Blanco-, presenta el tema con seriedad, inteligencia y originalidad, más allá de las cuotas de diversión del guión y de las conflictivas posturas de sus personajes que pertenecen al ambiente gay. El equipo actoral se maneja muy correcto en sus interpretaciones, aportan la cuota justa de emociones tanto en lo dramático como en la comicidad.

Actúan: Joe Seitun (Lorenzo), Cecilia Echagüe (Gabriela), Ele Kroupa (La Rusa) y Alan Shuartz (Fernando).

Amistades inquebrantables, valientes amores, adaptación, inseguridades, recelos y desconfianza reinan durante toda la puesta. No hay duda que la obra nos hace reflexionar sobre las nuevas formas de ensamblar una familia, la aceptación de la homosexualidad en nuestro país y la inmadurez que presentan jóvenes adultos que viven en una eterna adolescencia.

Un pacto que no es una rareza, sino que es muy común, es el que plantea la obra. Numerosos hombres conocidos o desconocidos son invitados a ayudar a parejas de mujeres a realizarse como madres. Ya sean amigos o desconocidos convocados de bancos de semen de clínicas, el caso narrado escapa de la ficción y es una tenaz realidad que afrontan varias personas en estas últimas décadas.

"Cromosoma 33" es una obra movilizante, sensible y que toda persona más allá de su condición de género o sexual debería ver para abrir más la cabeza o comprender la sociedad actual. A veces ponerse en el lugar del otro ayuda a aclarar las posturas y empatizar con toda relación que nace de dos personas que verdaderamente se aman. Se presenta en el barrio del Abasto, los domingos a las 21 horas en el Teatro “El Extranjero”. Si te gustan esta clase de historias ir es una buena alternativa.