La primera vez que leí acerca de una lluvia de peces mesonrojé, supuse que sería otra propuesta fantástica de Gabriel García Márquez. Pensé que el escritor se estaba tomando unade sus tantas licencias artísticas dentro del movimiento literario que el mismooriginó.

Es que el realismo mágico creado por Gabriel García Márqueza partir de su mega premiada obra Cien años de soledad, fue un quiebre para elmundo de las letras. Allí fue cuando me enteré por primera vez de esta lluviaque caía del cielo, pero de peces.

Más delante, mientras leía Kafka en la orilla de HarukiMurakami, sucedió de nuevo, apareció el realismo mágico de la mano de la lluvia de peces.

Tenía que averiguarqué estaba pasando. 

Si dos de los autores más vendidos y traducidos de todo elmundo, provenientes de idiosincrasias, continentes y culturas distintasmencionaban una lluvia de peces, no podía ser simplemente casualidad de realismo mágico. Había algo más.

Resultó que la lluvia de peces no era producto de la imaginaciónde ambos escritores, sino que era un fenómeno meteorológico real. El hecho seproduce anualmente en Honduras, en la ciudad de Yoro, allí, caen peces delcielo entre los meses de mayo y julio.

Asimismo, la lluvia mágica data de hace más de un siglo, y durante ésta época del año, los habitantes de la ciudad pueden observar peces de aguadulce esparcidos por los suelos luego de una fuerte tormenta.

Del otro lado del mundo, en Sri Lanka, también sucedió lomismo. Allí, en el distrito de Chilaw, sus habitantes notaron unos pequeñospescaditos cayendo del cielo. El fenómeno sucedió hace más de un año atrás yuna de las teorías estima que un tornado pudo haber aspirado los peces delrío, transportándolos hacía la atmósfera, provocando que luego caigan en forma delluvia.

Más allá del intento de los científicos por proporcionar unaexplicación acertada sobre este hecho que sucede en diversos puntos del planeta,los escritores se lo han adueñaron. Lo tomaron y lo volcaron al mundo literario.

La lluviade peces se encuadra también bajo el realismo mágico, porque si tanto aGarcía Márquez como a Murakami les pareció lo suficientemente potente como paraque formara parte de sus obras, no tenemos más que aceptarla y dejar lasteorías de lado.