Estos 11 hermanitos que ya llevan dos meses encerrados en la casa del "big" son un espejo de la realidad Argentina. Estos nuevos integrantes del reality muestran la desobediencia,  falta de respeto a las reglas y a la autoridad que se vive en el país. Desde el comienzo los chicos no sólo no cuidaban la casa, la mantenían sucia, desordenada, se arrojaban comida, le pegaron a las cámaras y demás. Y a esto se le suma la falta de consideración a la extensa paciencia del dueño de casa. Pero esto no fue lo único que nos demostraron los integrantes de la casa más famosa, también tuvieron advertencias por los complots, por no cumplir las reglas, como mantener los micrófonos puestos, y a pesar de las "multas" que les puso Gran Hermano, como las amarillas que ya acumularon varios participantes.

Hasta el momento parece que la única sanción que funcionó es la de haberle quitado los cigarrillos a Brian y el Gimnasio por más de una semana a todos los chicos.

Esto recuerda lo que sucede en la sociedad argentina: las multas son un chiste, prácticamente no se utilizan, y al que se las aplica pocas veces las pagan. La justicia parece nula, muchos de los jóvenes que llegan a la cárcel son reincidentes, y no les importa porque saben que salen. Esto es lo que se ve en ese pequeño reality que muchos critican, se ve la realidad del día a día, el argentino no respeta las reglas, y pocas veces alguien trata de cumplirlas.

Pero este "defecto" no es le único que muestran los hermanitos, también se ve la violencia que hay en esta sociedad, los insultos, los gritos y hasta las agresiones quedaron expuestas desde el primer día que ingresaron.

Más de una vez Gran Hermano tuvo que frenar las situaciones violentas de quienes habitan su casa. Y esto es otra de las cosas a las que uno ya esta acostumbrado a ver no sólo en esa casa si no en los noticieros, las novelas y hasta su propia realidad.

Por eso no hay que ver este programa como un simple reality show, sino como una nueva manera de ver como esta la sociedad y la manera en que vivimos, sin darnos cuenta.

Muchos criticaron el nivel sexual que tiene la casa, deberían observar los otros programas que no son realitys, comprobarán que no encuentran muchas diferencias en ese tema, porque eso también es algo a lo que estamos acostumbrados a ver en la tele y en la calle.